El presidente del Partido Socialista japonés, Inejiro Asanuma, murió apuñalado por un joven de 17 años ultranacionalista de derechas durante un debate político televisado.
El alcalde de Nagasaki, Motojima Hajime, fue tiroteado y herido de gravedad por miembros de un grupo de derechas.
El ex ministro de Trabajo, Hyosuke Niwa, fue asesinado a puñaladas por un hombre que pertenecía a las Fuerzas de Autodefensa de Tierra.
El vicepresidente del Partido Liberal Democrático (PLD), Makoto Kanemaru, fue tiroteado con un arma de fuego por un grupo de derechas, aunque no resultó herido.
Varios discípulos de la secta Verdad Suprema colocaron bolsas de plástico con gas sarín en estado líquido en varias líneas del metro de Tokio y las perforaron con un paraguas, lo que causó 6.300 personas intoxicadas, 13 muertos y decenas en estado casi vegetativo. El ataque se dirigió contra los trenes que pasaban por Kasumigaseki y Nagatacho, donde tiene su sede la Dieta (Parlamento japonés) en Tokio. Un mes después, una de las principales figuras de la secta, Hideo Murai, fue apuñalado hasta la muerte por un miembro del crimen organizado ante las cámaras de televisión.
El alcalde de Mitake, en la prefectura de Gifu (centro), Yoshiro Yanagawa, fue herido de gravedad en un atentado en su domicilio.
Un miembro del Partido Democrático (PD), Koki Ishii, fue apuñalado frente a su casa y perdió la vida a manos de un hombre perteneciente a una banda, que alegó motivos personales.
El exsecretario general del PLD, Koichi Kato, vio como una de sus casas y oficina fueron quemadas en el 61 aniversario de la rendición de Japón en la Segunda Guerra Mundial. El suceso se produjo a manos de una persona supuestamente afiliada a un grupo de extrema derecha.
El alcalde de Nagasaki, Iccho Itoh, recibió dos disparos por la espalda frente a su oficina de campaña y llevado al hospital, donde perdió la vida horas después.
Arrestan a un hombre por enviar un dron con material radioactivo al tejado de la residencia de Shinzo Abe en Tokio, entonces primer ministro, en protesta por la reactivación de las centrales nucleares en Japón.