Vladimir Kara-Murza, de 41 años, padece una enfermedad del sistema nervioso llamada polineuropatía.
AFP
La salud del escritor ruso Vladimir Kara-Murza, condenado a 25 años de cárcel por sus críticas al Gobierno de Moscú, "está empeorando". Así lo alertó su esposa, Evgenia Kara-Murza, en una entrevista a AFP en Ginebra, durante la Cumbre por los Derechos Humanos y la Democracia.
"Estoy claramente preocupada (...) Su salud está empeorando", sostuvo Evgenia Kara-Murza sobre el estado de su marido, de 41 años, con quien tiene 3 hijos.
Kara-Murza, quien era una de las últimas voces críticas al Kremlin que no estaba en la cárcel o en el exiliado, fue condenado el pasado 17 de abril a 25 años de prisión por varias acusaciones, entre ellas la de "alta traición".
El opositor ya sufría de graves problemas de salud antes de ser detenido, incluida una enfermedad del sistema nervioso llamada polineuropatía. Según su esposa, la dolencia fue causada por dos intentos de envenenamiento, en 2015 y 2017.
Evgenia teme que la condena de su marido agrave aún más su delicada situación. Vladimir Kara-Murza ha recurrido su condena, pero su esposa no tiene dudas de que será rechazada.
Para ella, la condena de su marido es "una pura y cínica venganza del gobierno ruso". "El régimen claramente ve a mi marido como su enemigo personal", afirma, y subraya que los envenenamientos, asegura, buscaban "matar, no amenazar".
También reconoce que la situación es "atrozmente dolorosa" para ella y para los tres hijos de la pareja, pero cuenta que Vladimir Kara-Mourza "se las arregla de alguna manera para seguir siendo buen padre para ellos, incluso entre rejas". "Él les enseña una lección muy valiosa: que deben enfrentarse con coraje a quienes les persiguen, que no deben rendirse nunca, que deben aceptar los riesgos, reconocerlos y continuar luchando", afirma.