Un Milei más "espiritual" que aspira a una transversalidad: Así llega a la Casa Rosada el nuevo Presidente de Argentina

Milei irrumpió hace un par de años en la política argentina con un discurso liberal transgresor y un carácter bastante explosivo, el mismo que ya intentó minimizar durante la campaña y que ahora también busca relegar una vez asumido el poder. Y si bien conserva su efusividad, sabe que ahora los ojos de toda una región estarán puestos sobre él, quien ya se autodenominó "el primer presidente liberal libertario de la historia de la humanidad".

Paralelo a este carácter más templado, el líder de la Libertad Avanza ha cultivado desde hace un tiempo una faceta más "espiritual". Y si bien siempre ha mostrado una inclinación hacia el esoterismo -relacionándose con una médium, por ejemplo- él mismo ha reconocido un acercamiento hacia el judaísmo: lo ha estudiado y cuenta con rabinos de confianza que incluso le dan consejos.

En la arista más política, Milei también ha moderado su discurso. Si bien su irrupción pública se dio gracias a un mensaje duro contra la "casta", a partir de la segunda vuelta el líder libertario se acercó a parte de este grupo que tanto despreció, encabezado por el ex presidente argentino, Mauricio Macri, quien lo apoyó públicamente en el balotaje de noviembre.

Esta inclinación ha quedado demostrada en la designación de su gabinete: son varios los nombres del macrismo -partiendo por la ex candidata Patricia Bullrich- que se han sumado al nuevo Gobierno. Pero esto no queda ahí, ya que el Presidente electo de Argentina incluso ha convocado a representantes del peronismo disidente y ha comulgado públicamente con las ideas del menemismo.

Según reporta el diario argentino La Nación, en los días posteriores a su triunfo en las urnas "el mundo espiritual ocupó buena parte en la agenda pública" de Javier Milei. Lo demostró con su viaje a Estados Unidos, donde visitó la tumba de Menachem Mendl Schneerson, rabino reconocido como uno de los hombres que revolucionó el mundo del judaísmo enarbolando las banderas del jasidismo.

Y es que sin ser judío, el Presidente electo argentino tiene una profunda cercanía hacia esa religión. Es sabido el vínculo de Milei con el centro Acilba, de la comunidad judeomarroquí argentina, a donde va a menudo para reunirse con el rabino ortodoxo Shimon Axel Wahnish, a quien el propio líder libertario define como su "guía espiritual" junto a su hermana Karina. Según reportan de la misma entidad a La Nación, sus visitas a la sede ubicada en el barrio porteño de Palermo son una vez a la semana o cada 15 días.

Sobre su vínculo con Wahnish, el fundador de La Libertad Avanza manifestó a Radio Jai que "me da mucha tranquilidad espiritual en un momento en el que recibo una infinidad de ataques de la casta política. Es una persona que quiero muchísimo, a quien consulto regularmente. Son discusiones que de repente pueden demandar dos o tres horas y que para mí son muy gratificantes, y me ayudan a crecer mucho y a entender las situaciones de una manera mucho más profunda".

Por otro lado, el empresario Carlos Maslatón, ex aliado político de Milei, aseguró a La Nación que este interés del Mandatario electo es de larga data. "Lo conozco hace diez años y siempre manifestó esa cercanía y admiración por el pueblo judío. Respecto a su inclinación por un judaísmo más religioso y más ligado al culto, la respeto como una decisión personal y espiritual y está dentro de su derecho a inclinarse por esa corriente", afirmó.

De todos modos, hay un sector de la comunidad judía que ve con cierto recelo este vínculo con Milei, ya que estiman que parte de la ciudadanía pueda relacionar las decisiones del Mandatario con el judaísmo, y eso podía promover ideas antisemitas. "Su cercanía no suma nada y nos hace mucho ruido. Nuestro objetivo, con este u otro gobierno, es trabajar para que podamos realizar las tareas comunitarias de manera tranquila. No buscamos más que eso, no queremos vincularnos con la política, ni tener mayor influencia. No queremos que frente a cualquier decisión que tome Milei, esta sea vinculada con la comunidad judía. Los judíos que están en política no representan a la comunidad, sino que son judíos argentinos que llegan a ese lugar", manifestó a La Nación una fuente que prefirió resguardar su identidad.

Pero esa "espiritualidad" de Milei también ha ido de la mano con su afición al esoterismo. Según el periodista Juan Luis González, autor de la biografía "El Loco", resulta "imposible separar al Milei espiritual, del Mimlei político". El profesional recordó, en esa línea, que el líder libertario recurrió a una médium para comunicarse con su perro Conan, fallecido hace unos años. Asimismo, ha dicho a cercanos que tiene la misión divina de ser Presidente.

El Milei actual también ha reflejado una inclinación hacia la transversalidad política. Ya una vez electo presidente, aseguró que sumará a los mejores a su gabinete, sin distinguir su inclinación política. Atrás quedó su discurso más duro que defendió durante la primera parte de la campaña, con duros dardos a la "casta". Ahora, estár recurriendo a la misma "casta" para gobernar. Aunque todavía quedan dudas sobre qué rumbo tomará.

Su primer acercamiento fue hacia el macrismo. Una vez confirmado su paso al balotaje con Sergio Massa, el líder de La Libertad Avanza recibió el apoyo público del ex Mandatario Mauricio Macri y la ex candidata presidencial Patricia Bullrich, a quien Milei en la campaña trató de "montonera que pone bombas en jardines de infantes". Una reunión en la casa del ex gobernante fue crucial para limar las asperezas y concretar la alianza.

Ya con el triunfo consumado, Milei sumó a nombres del macrismo en su gabinete. El más renombrado es el de la propia Bullrich, que volverá a liderar el Ministerio de Seguridad, igual como lo hizo durante la administración Macri. Pero eso no fue todo. ya que también recurrió a personeros del peronismo cordobés y a viejas glorias del gobierno de Carlos Menem.

Milei sabe que debe aunar fuerzas para poder gobernar y así llevar a cabo su agenda política. Sin mayoría en el Congreso, el referente libertario necesita apoyo transversal, precisamente, de la tan vilipendiada "casta".

"Del menemismo histórico al macrismo, del macrismo al massismo, de vuelta al macri-bullrichismo para acercarse después al peronismo racional del schiarettismo y luego animarse a acortar distancia con el peronismo en sentido más amplio e incluso, con el kirchnerismo y volver otra vez al menemismo, en algunos casos, en su versión más rancia, para cerrar el círculo con Patricia Bullrich como ministra de Seguridad: Milei hace sustitución de importaciones políticas sin pudor. No le queda otra", asegura Luciana Vázquez en su columna del diario La Nación.

La analista agrega que "a la incertidumbre diaria y generalizada que marca el tono del presente, Milei le responde con una imaginación política que se organiza explícita o tácitamente en torno a tres nombres clave de la democracia argentina: Carlos Menem, Néstor Kirchner y Mauricio Macri. En esos espejos políticos se delinean los desafíos que deberá encarar el presidente electo y también, los riesgos que enfrentará. Hay lecciones en ese pasado. Continuidades inesperadas, regreso de lo impensado y rupturas cargadas de riesgos que dan sentido, por el momento, a la idea Milei".

Sobre Menem, el propio Milei ha dicho que la primera parte de su gobierno "fue el mejor de la historia". Vázquez, no obstante, recuerda la serie de escándalos de corrupción marcados en aquella época, sobre todo relacionado con el modelo de privatizaciones de empresas públicas. De Kirchner, la analista dice que el libertario busca seguir su voluntad política y de poder que logró aunar fuerzas pese a ser el presidente menos votado en los úúltimos 40 años de democracia.

Y sobre Macri, la analista sostiene que Milei defiende "la utopía mínima del déficit cero y la racionalidad económica" que promovía el ex Mandatario derechista."En esa continuidad hay riesgos parecidos: que la gestión de la crisis económica no alcance, los problemas no se solucionen y el poder parlamentario, mínimo en su origen, quede jaqueado además por la presión de la calle, si la impaciencia gana a la opinión pública".

Así las cosas, Milei ya se asoma. Sólo queda ver quérumbo tomará en su gobierno.