Héctor Aravena, El Mercurio
SANTIAGO.- El General Director de Carabineros, Bruno Villalobos, hizo un llamado a la tranquilidad ante la preocupación que ha generado el avistamiento de presencia militar peruana en la frontera con Chile la semana pasada y aseguró que hasta ahora el Gobierno no ha ordenado una mayor vigilancia en la zona.
Tras sostener una reunión con el ministro del Interior y Seguridad Pública, Jorge Burgos, en La Moneda, la autoridad señaló que “la ciudadanía debe estar tranquila, nuestros carabineros cumplen a diario su misión de soberanía en nuestra frontera”.
“Por consiguiente, vamos a seguir continuando profesionalmente nuestro actuar, como lo hemos hecho hasta ahora”, añadió, descartando de ese modo una mayor presencia policial en la zona.
Antes, el jefe de gabinete subrayó que “nuestros límites están lo suficientemente resguardados desde el punto de vista del resguardo del orden público, de Carabineros de Chile”.
Asimismo, enfatizó que también lo están “desde el punto de vista del resguardo en nuestra integridad territorial, FF.AA. En consecuencia, respecto de aquello, podemos estar tranquilos como hemos estado tranquilos en la historia de nuestro país”.
Conflicto con el INDH
En cuanto a su opinión sobre el informe que publicó el organismo dirigido por Lorena Fries, en el que acusa a la policía de no permitir el ingreso de sus observadores a las comisarias para resguardar los derechos de los detenidos, Villalobos respondió que Carabineros tiene la mejor voluntad para hacer un trabajo conjunto con el INDH.
“Lo veníamos haciendo hace un tiempo y lo vamos a continuar haciendo de la misma forma en que lo estamos haciendo con Cruz Roja Internacional en los mismos temas. La primera primicia es que nosotros queremos trabajar en conjunto con ellos”, dijo.
Asimismo, explicó que “nosotros no estamos prohibiendo el ingreso a los cuarteles, de hecho, ellos son atendidos en nuestras oficinas al interior de los cuarteles. Lo que estamos discutiendo es la entrevista a los detenidos, en atención a que hay una superposición de los roles de los diferentes estamentos que tienen que ver con esto”.
El problema, a su juicio, es que “las visitas que quieren realizar tienen que ver con grabaciones y entrevistas a los detenidos, ahí es donde tenemos alguna diferencia, pero estamos dispuestos, de acuerdo a las instrucciones que nos impartió el ministro del Interior, a participar de esta mesa de trabajo y solucionar los problemas”.