SANTIAGO.- Los escandalosos desmanes ocurridos ayer, tanto fuera como dentro del Estadio Elías Figueroa de Valparaíso, previo al encuentro entre Santiago Wanderers y Colo Colo, no sólo pusieron en tela de juicio la seguridad de este tipo de espectáculos, sino también la actuación del encargado del denominado plan Estadio Seguro, José Roa.
El abogado -que fue jefe del Sernac durante la primera administración de la Presidenta Michelle Bachelet- fue el impulsor de una serie de cambios en la normativa que reemplazó a la antigua "Ley de Violencia en Los Estadios" y que pasó a llamarse "Ley de Derechos y Deberes en el Fútbol Profesional".
Emtre las modificaciones prometidas e impulsadas por Roa está la revisión completa de cada uno de los asistentes a estos recintos deportivos, sin embargo, ayer se pudo apreciar a hinchas con armas blancas e incluso bengalas dentro del estadio.
En diciembre de 2014, Roa había anunciado que "si hay 30 mil hinchas, todos serán revisados".
La situación se ha repetido en encuentros anteriores, como cuando barristas de Colo Colo ingresaron un bombo a un partido el 31 de octubre pasado, pese a que tienen prohibición de hacerlo.
Asimismo, la nueva normativa también establece que los intendentes son los responsables de suspender los partidos de fútbol en caso de hechos de violencia. Al respecto, Roa señaló a los medios en 2014 que la decisión de seguridad "no puede quedar en manos de un árbitro".
Ayer, los graves desórdenes comenzaron antes del encuentro, pero eso no fue motivo para que éste fuera cancelado por parte de la máxima autoridad política regional, sino que fue el juez del partido Enrique Osses, quien decidió no dar el pitazo inicial.
Tras los desmanes Roa, deslindó la responsabilidad a los guardias privados, acusándolos de reaccionar lentamente ante los hechos de violencia que se desarrollaban en el pasto del Elías Figueroa.
También se prometió que con las nuevas medidas "las familia volverían a los estadios", pero lo cierto es que han bajado los niveles de asistencia a estos recintos desde el año 1994 a la fecha.
Lo anterior, según ha dicho Roa a los medios en septiembre de este año, es más porque "se ha instalado la percepción de que hay violencia en los estadios", y no por un aumento real de la violencia en los recintos deportivos.
Parlamentarios oficialistas y oposición ya solicitaron que el abogado dé un paso al costado.
