Los vecinos alertan de los daños que podría sufrir el Parque Forestal y el Museo de Bellas Artes.
El Mercurio
SANTIAGO.- A menos de una semana de la última marcha, que terminó con la
profanación de la Iglesia de la Gratitud Nacional, los estudiantes secundarios pidieron permiso a la Intendencia Metropolitana para realizar una nueva manifestación en Santiago.
Para evitar que se repitan los hechos de violencia, los dirigentes de la Cones y la ACES
propusieron a la autoridad un recorrido alternativo, que no pase por la Alameda, sino que comience en Plaza Italia y avance por el costado del Parque Forestal, hasta la Estación Mapocho.
Sin embargo, los vecinos del Parque Forestal se oponen a ese trazado y llaman al intendente, Claudio Orrego, a que no autorice la marcha en esa zona. Éstos niegan que con ese recorrido se produzcan menos destrozos y alertan de los daños que se podrían producir a la infraestructura pública, como el parque y el Museo de Bellas Artes.
"El argumento de los estudiantes no es real, nosotros ya lo vivimos en años anteriores, donde pasaron muchas marchas por el Forestal y en todas había destrozos, rayaban nuestros edificios patrimoniales, vimos cómo rompían los vidrios del Museo de Bellas Artes y las luminarias del Parque Forestal", dijo a Emol la vocera de los vecinos, Marlen Carvajal.
"El terreno es un peligro"
La dirigenta advirtió además que hay lugares dentro del trazado, como calle San Antonio, donde hay acumulado material de construcción y escombros, que bien podrían ser usados para provocar destrozos.
"El grupo que vaya a destruir va a tener a su alcance una cantidad de materiales que pueden ser usados como proyectiles. Están los pastelones sueltos para que los cabros los tiren. El terreno como está hoy día es un peligro", afirmó.
De todas formas, aclaró que los vecinos no están en contra de las marchas ni de las demandas de los estudiantes, pero piden que éstos los consideren al momento de definir los recorridos. "Queremos conversar con ellos y colaborar cuando quieran hacer recorridos, ver los lugares más factibles de usar, a nosotros también nos interesa la educación, nosotros como vecinos también podemos salir y preocuparnos de los edificios patrimoniales, eso lo podemos hacer, pero tomennos en cuenta", señaló.
Los vecinos son respaldados por el concejal de Santiago Felipe Alessandri (RN), quien está pidiendo al intendente que no autorice la marcha de esta semana, ya que asegura que "los ánimos están agitados", y propone que ésta se programe para más adelante, consensuando un recorrido entre los estudiantes y los vecinos. También emplazó al municipio de Santiago a ser más activo en este tema y respaldar a los vecinos de la comuna.
La Intendencia debería definir durante esta jornada si autoriza la marcha de este miércoles. Ayer el intendente Orrego sostuvo que si los estudiantes no ofrecían condiciones para evitar los hechos de violencia, no habría permiso. "No sé qué medidas van a proponer para evitar los actos de violencia, pero mientras no tenga esa garantía, no puedo autorizarla", señaló.