"trabajamos en leyes que tiene algún carácter relevante para Dios", afirma.
Agencia Uno
SANTIAGO.- Marcela Aranda Arellano es la mujer que desde que comenzó a hablarse del llamado "Bus de la libertad" ha visitado diversos programas y hablado sobre la igualdad de género, la que ella denomina "ideología de género" y a la que ha llamado a oponerse con fuerza.
Ex alumna de la Universidad Católica, según afirma en su perfil de Facebook, Aranda nació en Viña del Mar, ciudad costera de la Región de Valparaíso donde registra domicilio.
En una entrevista concedida a Espitirual Televisión en enero pasado, Aranda detalla que pertenece, junto a su esposo, al Observatorio Legislativo Cristiano, agrupación que, asegura, presta asesorías legislativas en el Parlamento.
"Vamos al Congreso, trabajamos con diputados y senadores y trabajamos en leyes que tiene algún carácter relevante para Dios, partimos con cinco proyectos en el 2014 y hoy estamos siguiendo a 61", contó entonces.
"La Palabra dice que Dios vino a sacar a la luz las obras del diablo. Eso es lo que hacemos, ir y deconstruir esta ideología e influimos en las leyes, artículo por artículo, inciso por inciso", afirmó.
Explicó que dicho observatorio obedece al Ministerio Gobierno y Fe que encabeza y donde "trabajamos con pastores que Dios a puesto para interceder, no es una batalla fácil. Nosotros pertenecemos a una nación, a un reino que es Santo donde la Escritura es nuestra única fuente de revelación".
Aranda fue asesora del senador RN Francisco Chahuán (2012), del diputado DC Jorge Sabag (2016), a la Municipalidad Villa Alemana (por unos meses) y trabajó como asesora en la Gobernación de Valparaíso.
Allí, de acuerdo a documentos oficiales, se desempeñó en la "Unidad de Gestión y Proyectos", donde los ciudadanos pueden recibir asesoría para postular a proyectos del Fondo Social Presidente de la República y otros dineros concursables de gobierno.
Más tarde, a fines del gobierno de Sebastián Piñera, en 2014, prestó asesoría parlamentaria en el área de la salud como contraparte técnica de los proyectos del Ministerio de Salud con el Congreso. Por esa labor percibió $1,3 millón.
Aranda -quien sostiene que es ex alumna del colegio Calasanz- ha sido el rostro en el país del bus de la controversia, repudiado por unos y alabado por otros, y que es una iniciativa de la ONG española Citizen, "una comunidad de ciudadanos activos que busca promover la participación de la sociedad en la política.
Uno de sus hitos como rostro contrario a la igualdad de género fue asistir a la 46 Asamblea General de la OEA, donde levantó una bandera de Chile que decía "No a la ideología de género".