SANTIAGO.- La postal, desde hace más de veinte años, era característica: un hombre vestido primero con faldas hasta la rodilla, después con pantalones oscuros, pero siempre con un pañuelo amarrado sobre su cabeza y detrás de un carro de supermercado cargado de artículos tecnológicos obsoletos o juguetes de niños. José Pizarro Caravantes, más conocido como el "Divino Anticristo", era parte del paisaje del barrio Lastarria y sus alrededores.
La madrugada de este sábado, pasadas las 04:00 AM, el cuerpo sin vida de Pizarro fue encontrado en Marcoleta, cerca de la esquina con Portugal. De manera preliminar, Carabineros descartó la participación de terceros, aunque la causa de su muerte será investigada en el Servicio Médico Legal.
A pesar de ser un personaje habitual del centro de Santiago, poco se sabía con certeza de José Pizarro. Se dijo que había sido abogado, también que fue médico, que había encontrado la cura al cáncer, que se había casado y tenía un hijo, que era un filósofo alemán, una monja reencarnada. Los dos últimos fueron cartas de presentación esgrimidas por él mismo.
Un ciudadano llamado José Pizarro
El "Divino Anticristo" nació en mayo de 1953 y era el mayor de cuatro hermanos. Estudió en el Liceo José Victorino Lastarria y, tras dar la Prueba de Aptitud Académica, se trasladó a Valparaíso para estudiar Literatura en la Universidad Católica.
Después dejó la carrera y se cambió a estudiar Computación en la Universidad de Chile. Se casó en 1973 y de ese matrimonio nació un hijo, el único que tuvo, a pesar de que él afirmaba tener dos viviendo en Alemania.
Así es como presentó la historia su hermano, Ricardo Pizarro, un reconocido activista del ciclismo que falleció de manera sorpresiva en 2011, y que en 2006 decidió hacer pública la historia de su familia para pedir ayuda: José había sido retirado de la clínica psiquiátrica Normita Fournet, en la que había sido internado dos meses antes por petición suya.
En esta foto compartida por Ricardo, se puede ver a José (con polera verde) junto a su madre y sus hermanos en 1969.
Para él, el escenario podía ser favorable para la salud de su hermano, pero tras la presión ejercida por grupos de ciudadanos y medios de comunicación, Pizarro volvió a las calles de Santiago Centro. Por eso abrió una página web, llamada "Sanemos al Anticristo".
"No es fácil encontrar una solución única que resuelva toda la problemática de José. Sus carencias son múltiples. Su personalidad, fuerte, muchas veces no permite un acercamiento más allá de alguna frase y, por si fuera poco, existen en este momento posturas antagónicas en cuanto a cómo ayudarlo", afirmaba entonces Ricardo.
Aunque no esperaba que se pudiera erradicar la esquizofrenia paranoide crónica que le diagnosticaron en el centro, creía que se podían "mejorar sus actuales condiciones de vida sin necesidad de sacarlo de su entorno".
"Liberen al Anticristo"
Cuando se conoció de su internación, un grupo de jóvenes cercanos al personaje y la librería "Flor de Lis", donde fabricaba sus revistas, empezaron un movimiento llamado "Liberen al Anticristo".
Para eso organizaron actos públicos en protesta, como una "marcha de los pañuelos", imitando el que llevaba en la cabeza, por las calles de Lastarria, además de "actos poéticos". El mismo "Divino Anticristo" relató su experiencia en el recinto luego de pasar ahí dos meses.
"Nosotros estuvimos internados en una clinica siquiátrica poco más de un mes y no habríamos salido en por lo menos en diez años si no fuera por el apoyo incondicional de una COMPAÑÍA DE POETAS QUE SE TOMARON LA MOLESTIA DE PROTESTAR (sic) por la infamia que me estaba ocurriendo, que me estaban inventando enfermedades porque una inmobiliaria reclamó que mi presencia en el BARRIO LASTARRIA les perjudicaba su venta de departamentos, que entreparéntesis están mal construidos porque les faltan dos metros de AISLAPOL entre cada pasísimo", afirmó.
Su faceta literaria
Los jóvenes, a quienes él llamaba poetas, eran admiradores de su obra: revistas escritas, fotocopiadas y compaginadas por él, que trataban generalmente de política y de nazismo.
"La danza de los billones de dólares", "La verdadera historia de Alemania", "¿Cómo quitarle la plata al BCI?" o "Elegancia máxima para Chile y Argentina" son algunos de los títulos de sus ejemplares, que tenían en el encabezado una bandera alemana y, a modo de encuadernación, cinta de embalaje.
En 2009, Pizarro abandonó Lastarria para irse a vivir a Los Andes. Dijo que se demoró tres días en llegar a pie, con su carro, que en la ciudad cambió por un coche para bebés. Afirmó que se había ido porque no le gustaba la lluvia, pero volvió en 2010 porque allá hacía demasiado calor. Según él, se volvió caminando. Su hermano dijo que él lo fue a buscar.
Dijo, también, que volvió porque allá nadie compraba sus escritos, ni tampoco los objetos que rescataba muchas veces de la basura. "En cambio llegué acá y he vendido más de 40 libros en la pura mañana", afirmó en ese momento a The Clinic, que usualmente le cedía espacio para escribir columnas o lo entrevistaba.
El "Divino Anticristo" volvió a Santiago a principios de enero, semanas antes de la segunda vuelta de la elección presidencial, en la que se enfrentaban Sebastián Piñera y Eduardo Frei. La expectación por los comicios, afirmaba, hizo que en la capital se agotaran sus revistas.
El "Divino Anticristo" y la política chilena
Pizarro aseguraba que recibía revelaciones divinas con respecto a todo tipo de temas, y la política no era una excepción.
"En mi 'Evangelio según el Divino Anticristo' salen todas las revelaciones de estas elecciones (...) Llevo los últimos meses diciendo por quién voy a votar, si voto o no voto, que esto y lo otro, pero ya no lo voy a decir más. En Los Andes, la gente no sabía ni qué era la república po, yo tenía que explicárselos una y otra vez”, afirmaba Pizarro en ese enero.
No fue su único acercamiento a la arena política chilena, sino que se refirió en incontables ocasiones al tema a través del pasquín. Dijo en un par de ocasiones que Piñera y su esposa, Cecilia Morel, se "vestían mal". "La primera dama se viste sencillamente como cuidador de autos de Munich o de Cambodia, y Piñera de viste de cirujano dentista", aseguró en 2012.
En julio de 2017, publicó uno de sus más recientes números, donde dio cuenta de una conversación que, aseguraba, había escuchado de manera telepática entre Ricardo Lagos y Michelle Bachelet.
Lagos, según el "Anticristo", le habría dicho a Bachelet: "Tú tienes que aprovechar que todavía te creen poderoso los americanos del Kremlin y te puedes hacer la América si renuncias a la presidencia a favor mío o del Piñera".
"Muchos deficientes mentales andarán diciendo que este diálogo es inventado y no real. Son personas que solamente aceptan los conocimientos de las ciencias naturales y por rebeldía contra el SEÑOR DIOSÍSIMO rechazan toda sabiduría sobrenatural", se defendía entonces el "Divino Anticristo".