SANTIAGO.- En la última década, la identificación de los chilenos con las religiones católica y evangélica se ha mantenido relativamente estable. También lo ha hecho el número de quienes se declaran ateos o agnósticos, según reveló la Encuesta Nacional Bicentenario 2017, realizada por el Centro de Políticas Públicas de la Pontificia Universidad Católica de Chile y GfK Adimark.
Según el estudio, el 59% de los chilenos se declara católico, cifra que alcanzaba un 66% en 2007. Mientras, un 17% dice ser evangélico, solo un punto menos que hace una década.
Donde sí se ha habido cambios es en lo que los chilenos dicen sobre su fe. En los últimos diez años, cayó de 93 a 77% la cifra de quienes afirman "creo en Dios y no tengo duda de ello". Ha crecido, en cambio, al porcentaje que reconoce creer "en algunos momentos sí, en otros no".
Además, la participación en servicios religiosos -sin considerar funerales, bautizos y matrimonios- es baja. Según el sondeo, solo un 40% de los evangélicos y un 10% de los católicos lo hace al menos una vez por semana.
Asimimso, una fracción minoritaria de quienes dicen pertenecer a una de las dos religiones tiene interés en transmitir a sus hijos esas creencias, o que estos las vivan de maneras concretas. Por ejemplo, solo el 61% querría que se casen en un matrimonio religioso y un 31% preferiría que asistan a un colegio con una orientación afín a una religión.