SANTIAGO.- "
La situación de ellos es sumamente grave, porque hay grabaciones que los inculpan seriamente". Eso fue parte de lo manifestado por el senador
Manuel José Ossandón, quien se refirió hace algunos días a la situación de los dos chilenos detenidos en Malasia desde agosto del año pasado, quienes arriesgan la pena de muerte en la horca por el presunto delito de homicidio.
El parlamentario dijo haber recibido antecedentes de terceros y aseguró a CNN Chile que "después de la información que me dieron, soy súper pesimista" respecto a la situación de Felipe Osiadacz (27) y Fernando Candia (28).
"Un funcionario de la Cancillería me dio toda la información que pedí y me contó que salía en la grabación", señaló el legislador miembro de la comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Material, según Ossandón, que proviene de las cámaras de seguridad del lobby del recinto donde se hospedaban los chilenos, y donde ocurrió el hecho que les imputan.
"Uno se sentó en el pecho y el otro le levantó los pies. El otro (malayo) se empezó a ahogar hasta que se murió", agregó.
Dichos de Ossandón que fueron criticados por el abogado asesor de la familia de los chilenos aludidos, Juan Carlos Manríquez, quien indicó a radio ADN que "me preocupa el hecho de que el señor parlamentario haya dicho que él no vio el video sino que un tercero se lo relató y que sobre eso haga un juicio categórico que puede poner en riesgo la vida de dos personas en un estado muy lejano".
Además, continuó el jurista, según los antecedentes que él maneja, la muerte se da "como consecuencia de una ataque cardíaco con una ingesta considerable de, al menos, cinco drogas".
"Bajo ese punto de vista, no hay ningún antecedente, que yo conozca, que pueda sostener un homicidio, sino más bien condiciones de un ataque confuso y donde dos personas se defienden", concluyó Manríquez.
