SANTIAGO.- El fiscal José Miguel Subiabre informó esta mañana que los dos presuntos autores del crimen del profesor en Valparaíso,
Nibaldo Villegas (49), serán formalizados por los delitos de
parricidio y homicidio calificado, a la vez que señaló que ambos actuaron de forma
premeditada.
El persecutor entregó detalles de la detención a las 21.00 horas de la esposa del docente, con quien ya no mantenía una relación, identificada como Johanna Hernández, junto con el arresto de la pareja de la mujer, Francisco Silva. A la primera se la imputarán cargos por parricidio, mientras que el segundo será acusado por homicidio calificado. El crimen, según el fiscal, se llevó a cabo en el domicilio de la víctima.
El parricidio, según explicó Subiabre, se establece ya que "su vínculo legal de matrimonio con el afectado aún está vigente. La segunda persona, por homicidio calificado, teniendo en cuenta que ha existido una premeditación en la ejecución de este hecho".
La audiencia de formalización se llevará a cabo hoy a las 12.00 horas en el Juzgado de Garantía de Valparaíso. En la instancia el fiscal aseguró que se va a comunicar "cómo ambas personas que fueron detenidas el día de ayer, participaron directamente en el homicidio de la víctima, cómo lo hicieron y cómo se premeditaron las acciones que ellos efectuaron".
"Entendemos que hay premeditación por la forma en cómo se ejecuta el hecho. La única forma de haber efectuado este delito fue la planificación previa en la ejecución de este", aseveró.
Además señaló que las motivaciones por las cuales se habría perpetrado el crimen "más o menos está claro. Vamos a exponer como corresponde en la audiencia ante el tribunal".
La familia de Villegas perdió su rastro el pasado 9 de agosto, y 6 días después fue encontrado por la Armada un torso desmembrado flotando en el mar a la altura del muelle Prat. Tras las primeras investigaciones, el pasado lunes se logró establecer que el cuerpo pertenece al profesor de computación.
Esta mañana se llevó a cabo el arresto de los dos únicos sospechosos por este caso. Tras ello, fueron traslados desde el cuartel de la PDI hasta el tribunal, a la salida del primero los familiares de la víctima se lanzaron contra el carro policial, propinándole golpes de puños y patadas, junto con expresar insultos hacia los imputados.
