SANTIAGO.- El sábado en la noche, el presbítero Raúl Hasbún fue notificado de la decisión del Papa Francisco de expulsar del sacerdocio al ex vicario de la solidaridad, Cristián Precht.
A este último, lo defendió en proceso canónico iniciado en su contra en 2012, el cual concluyó con una condena por "conductas abusivas" la cual le significó al religioso estar cinco años alejado del ejercicio sacerdotal, además de una vida de oración y penitencia.
Ahora, nuevas acusaciones pesan en contra del ex sacerdote conocido como defensor de los derechos humanos durante la dictadura. De acuerdo al vicario judicial, Jaime Ortíz de Lazcano, la decisión del Sumo Pontífice está ligada a las denuncias en el marco del caso Marista, "y otras".
Frente a esto, Hasbún señaló en una carta enviada a El Mercurio y en calidad de procurador y abogado canónico del indagado, que el decreto que dispone su dimisión "no hace especificación alguna de los graves delitos por los que habría sido condenado" por la vía administrativa, lo cual significó además que ni "siquiera se le haya instruido un proceso":
En esa línea, agregó: "Según el vicario judicial de Santiago, la Doctrina para la Congregación de la Fe ha estimado que los antecedentes son 'de tal claridad y magnitud, que no han requerido de mayor investigación' (...) La denegación del derecho de defensa en un proceso racional, justo y legalmente tramitado hace insanablemente nula toda sentencia condenatoria".
Y concluyó: "El mismo acto de la notificación dejé constancia escrita de que demandaré, ante todas las instancias jurídicas, la nulidad insanable de todo lo obrado y decretado en contra de la honra y ministerio sacerdotal del Pbro. Cristián Precht Bañados".
Actualmente, Precht también está siendo indagado por encubrimiento en el caso que involucra al ex capellán de la FACh, Pedro Quiroz, como autor de presuntos abusos sexuales. Por este caso, el ex vicario ya declaró como imputado ante la Fiscalía Metropolitana Sur.
