Abuso de monjas en la Iglesia: Expertos analizan las "señales" detrás del histórico reconocimiento de Francisco

Creo que Francisco hace esas declaraciones porque sabe que comenzarán a hacerse públicos casos que nos mostrarán la hondura y gravedad de estos abusos. Varias veces la Iglesia católica habló de las injusticias que padecen las mujeres pero se ha referido escasamente al daño que la misma institución les ha causado.

Pero no creo que haya que hacerse muchas expectativas (de cambio). El espacio de las mujeres ha sido históricamente conquistado, no recibido. Pero en este contexto , el reconocimiento de Francisco se trata indiscutiblemente de una señal, que podemos interpretar y usar a favor de las mujeres que están en situaciones de injusticia.

Me parece que el reconocimiento que hace el Papa, sobre todo del abuso sexual e incluso formas de esclavitud en la vía religiosa de mujeres, llega tarde pero es importante (...). Llega tarde porque el conocimiento dentro de la Iglesia era un secreto a voces. Pero evidentemente tiene un enorme valor debido al reconocimiento que hace el Papa de esa situación, en el contexto del encuentro de las conferencias episcopales (próximo 21 de febrero), y trazar el camino a la superación de la lógica que está detrás de estos abusos, que es el clericalismo.

(Lo dicho por el Papa) ha generado una aliciente para poder enfrentar en el futuro este tipo de prácticas. Entonces, en balance, el Papa Francisco pone el dedo en la llaga nuevamente en un tema central, hay un gran tema ahí por superar en la Iglesia católica. En la raíz está el clericalismo abusivo de parte de un clero que consideró que laicos y religiosas era más o menos gente que estaba a su servicio y que podían abusar de ellos.

Enfrentar ese cambio va a requerir un cambio en la formación de los sacerdotes, un cambio en la cultura organizacional de la Iglesia, cambio en la forma de control de parte de los obispos al clero y también a los mismos obispos de parte de algún tipo de control desde abajo hacia arriba.

Esta es una situación que hoy día se empieza a develar a la luz del Papa Francisco, lo cual , en lo personal como historiador de la Iglesia, agradezco, y agradezco porque empezamos a visibilizar una realidad en la Iglesia Católica, una Iglesia que en algún momento algunos pensaron que era perfecta, pero no.

La religiosidad católica está viviendo por un proceso complejo de búsqueda de no más abusos dentro de ella. Por lo tanto, en este no más abusos, el Papa habló del tema de las mujeres (...), (lo que) claro que tiene elementos históricos porque hay un reconocimiento de una realidad que es una realidad muy dolorosa y muy compleja que está viviendo la Iglesia católica. Por lo tanto el Papa Francisco lo que sigue haciendo es seguir siendo un hombre que está dando cuenta de una verdad interna y que no tiene miedo a poder plantear las cosas como son, por su nombre, duelan como duelan. Este Papa intenta de que empiecen a hacerse cargo.

El Papa con esto abre el debate, la investigación y le da fuerza a algunas personas que están trabajando estos temas y que han sido portavoces para poder levantar el dolor de las mujeres con vocación que han sido abusadas por obispos y sacerdotes.

Este reconocimiento del Papa, que sorprende a algunos, lo debemos entender dentro del contexto de una infatigable lucha contra el abuso contra hombres y mujeres, dentro y fuera de la Iglesia que conduce personalmente el Papa Francisco. El gran drama del abuso es que tiende a invisibilizar a las víctimas, quienes son los que han sufrido un daño irreparable. Por lo tanto un verdadero camino de reparación es aquel en que se transparenten los casos, que se sepa la verdad y que se haga justicia para las victimas, que es lo que el Papa esta haciendo.

Queda camino por avanzar, pero en lo concreto, esto ya esta ocurriendo hoy, así vemos como varias mujeres están liderando los equipos que están enfrentando el abuso en Chile. En la Pontificia Comisión para la Protección de Menores del Vaticano también tiene a una mujer laica en altos puestos de responsabilidad. Este pontificado le ha dado visibilidad a la relevancia e importancia que tiene la mujer dentro de la Iglesia. Esto es parte del proceso de conversión que espera el Papa para la Iglesia.