Ayer el ex intendente metropolitano
Claudio Orrego, manifestó que él espera que el "
efecto asado" en la contaminación ambiental se considere a la hora de decretar políticas públicas relacionadas a combatir la mala calidad del aire de Santiago.
La primera vez que la otrora autoridad había comentado sobre esta situación fue en 2014 durante el
Mundial de Brasil 2014, cuando al día siguiente del partido entre Chile y Australia se decretó alerta ambiental.
Y si bien fue blanco de críticas al respecto, la ministra de Medio Ambiente,
Carolina Schmidt, respalda su teoría -al igual que muchos expertos-, pero
descartó la posibilidad de prohibir los asados a carbón durante los días de contaminación.
"(Orrego) tenía toda la razón, nosotros tenemos que tener claridad de que hoy día nuestro país el 87% de la contaminación por material particulado se produce por combustión de leña, esa es la principal razón y si bien esto lo vemos mucho más en el sur del país donde se utiliza de manera masiva (...) cuando hacemos asado incrementamos justamente las emisiones de combustión por leña", comentó la secretaria de Estado en conversación con EmolTV.
"Hay un plan de descontaminación para Santiago que está funcionando de muy buena manera, pero son episodios puntuales, tenemos que entenderlo, creo que es una responsabilidad de los políticos entender y acelerar transformaciones que hoy día la tecnología lo permite hacer, pero también vamos haciéndolo en conjunto con el entendimiento de que son las necesidades sociales", añadió.
Además, la ministra dijo que "aunque se generan en esos días una mayor emisión, no creo que a nivel global como plan de descontaminación general tenga un impacto tan grande y sí lo tendría relevantemente en el día del partido".
Finalmente, llamó a que "tratemos de ir cambiando por una combustión más limpia y yo creo que eso un plan de descontaminación más grande, que abarque todas las medidas de transporte, de emisión de chimeneas, en las empresas puede conseguir de una manera más efectiva".