SANTIAGO.- El destacado psiquiatra chileno
Claudio Naranjo, también académico y referente mundial de la
psicología transpersonal y la Gestalt, falleció a los
87 años de edad.
Su deceso fue dado a conocer esta mañana por la fundación que lleva su nombre.
"Con dolor y amorosidad os queremos comunicar el fallecimiento de nuestro querido maestro Claudio Naranjo la pasada noche (12.7.19) en su residencia de Berkeley. Os rogamos lo tengáis presente en vuestras meditaciones y oraciones. Qué su amor y sabiduría nos acompañe siempre", señaló en su tuit.
Nacido en el Cerro Alegre de Valparaíso el 24 de noviembre de 1932, no tenía buenos recuerdos de su infancia, tal como reveló en una entrevista con Revista Sábado de El Mercurio en abril de 2018. "Me pusieron de interno (...) Fue una pérdida, un gran empobrecimiento de la vida (...) Lo peor es la pobreza de la vida en un internado", recordó.
Hijo único, Naranjo se describió entonces como un
niño "muy callado, de poca expresión". "Estaba medio adormilado, un niño muy poco consciente.
Era un poco zombi. Poco a poco con la vida he ido despertando", dijo.
Asimismo, afirmó que tenía una
mala relación con su madre. "Ella, en primer lugar, nunca fue una persona interesada en ser madre. Era una persona que salió del paso de haberse casado con mi padre, que quería tener hijos; entonces, fue como que si le hubiera concedido eso y nunca tuvo una actitud maternal", sostuvo.
"Si me hubiera quedado en Chile, mi vida hubiera sido empobrecida"
Pese a que
alguna vez quiso ser músico, finalmente se
decidió a estudiar medicina, carrera de la que se licenció como doctor en 1959. Fue contratado por la Escuela de Medicina de la Universidad de Chile para formar parte del Centro de Estudios en Antropología Médica. Al mismo tiempo, hizo su residencia en psiquiatría en la Clínica de Psiquiatría de la Universidad de Chile.
Su carrera despegó luego de comenzar su beca Fullbright en la Universidad de Harvard. También estudió en la Universidad de Illinois y en la Universidad de California en Berkeley. Ganó la beca Guggenheim y se quedó viviendo en Estados Unidos.
En 1970 vivió la
trágica muerte de su hijo de 11 años en un accidente automovilístico. "Ella (su ex esposa) con el niño fueron a un picnic en el día del Viernes Santo. Yo estaba en San Francisco, en un funeral, cuando se descarriló el coche que llevaba a mi hijo. Rodó por el abismo, por un acantilado", recordó.
"Lloré muchísimo (...) Estaba absorto en mi profesión, en mis ambiciones profesionales.
Lamenté mucho todo lo que no alcancé a darle", confesó.
Naranjo no volvió a tener hijos y
se dedicó a viajar por el mundo, visitando las escuelas que enseñan su visión de la terapia Gestalt -"una forma de vivir, un proceso educativo y de ayuda espiritual", según explican en su fundación- en Italia, España, México, Brasil, Colombia y Chile.
Fijó su residencia en Berkeley, California, donde vivía solo. "
Si me hubiera quedado en Chile, mi vida hubiera sido empobrecida, no me hubieran crecido las alas (...) Siento que
me aprovecharon más acá, en Estados Unidos. En Chile el ambiente me echaba para abajo, competitivamente", consideraba.
En enero de
2018 , poco después de ser
diagnosticado con la enfermedad de
Parkinson, participó en el
Congreso del Futuro, donde hizo una de sus
presentaciones más destacadas al criticar duramente a la educación. Dijo: "Hay que tener educación inclusiva; entonces,
dar la educación que tenemos es darle mierda a todos".
Posteriormente, el Ministerio de Educación le otorgó la
Orden al Mérito Docente y Cultural Gabriela Mistral en el grado de Comendador, premio que se entrega por la "contribución en beneficio de la educación, la cultura y el enaltecimiento de la función docente".
Naranjo
escribió 21 libros y está
por publicarse su autobiografía de dos volúmenes.
