SANTIAGO.- Algunos más críticos, otros más comprensivos. Los medios internacionales abordaron desde distintas persepectivas la decisión del Presidente Sebastián Piñera de cancelar la realización en Chile de las cumbres de la APEC y la COP25.
La medida, según explicó el mismo Mandatario, se debe a "las difíciles circunstancias que ha vivido nuestro país y que hemos vivido todos los chilenos durante las últimas semanas, y considerando que nuestra primera preocupación y prioridad como Gobierno es concentrarnos absolutamente en, primero restablecer plenamente el orden público, la seguridad ciudadana y la paz social".
Dentro de los artículos de prensa extranjera recopilados por Emol, uno de los más duros con la gestión de jefe de Estado es el de La Nación, Argentina.
"En un fuerte revés para su anhelo de transformarse en un referente regional a nivel estratégico y en un líder en materia medioambiental, el presidente Sebastián Piñera informó ayer la suspensión de la cumbre climática COP25 y del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC)", se señaló.
Y agregó: "La medida fue un balde de agua fría para las aspiraciones del gobierno de transformarse en el escaparate mundial de un pacto parcial entre Estados Unidos y China para solucionar la guerra comercial entre ambas potencias".
"No logra aplacar las violentas protestas"
En tanto, The Washington Post (EE.UU.) se limitó a agregar, tras la comunicación de la suspensión, que "su administración ha tenido dificultades para terminar con las demostraciones ciudadanas en contra de las desigualdades sociales en Santiago”.
Por su parte, el diario peruano La República estableció tras la noticia que "el mandatario derechista Sebastián Piñera no logra aplacar las violentas protestas en Chile, que se saldan con 20 muertos, pese a que hizo concesiones impensables hasta hace unas semanas".
"La medida fue un balde de agua fría para las aspiraciones del gobierno de transformarse en el escaparate mundial de un pacto parcial entre Estados Unidos y China".
La Nación.
Más tajante fue Uta Thofern, redactora en jefe del departamento América Latina del medio alemán DW, quien catalogó las cancelaciones como "Una derrota para Chile y para Latinoamérica, en la que la violencia triunfa sobre la política".
"La cancelación de las cumbres no hará que las exigencias justificadas de los manifestantes, en su mayoría pacíficos, vayan a ser satisfechas más rápidamente o de mejor manera", precisó Thofern.
Y añadió: "Aun cuando el presidente chileno haya vendido su decisión de ese modo, la verdad es que su Gobierno está cediendo ante la violencia de una pequeña pero brutal minoría. Una minoría de la cual, hasta el momento, la mayoría pacífica de los manifestantes no se ha distanciado, y que en los medios ha recibido demasiado poca atención".
Tajante también fue el diario mexicano Pulso al narrar: "La decisión es un golpe a la imagen que el presidente intentaba mostrar de Chile como un oasis de estabilidad regional y desarrollo económico, y aunque algunos creen que podría afectar la reputación del mandatario, diversos actores políticos consideraron que no había otra alternativa".
