SANTIAGO.- Faltaban cerca de dos cuadras para que
Xaviera Rojas (18) llegara a la
Casa de la Cultura de San Bernardo, lugar donde tenía programado un ensayo de ballet folclórico, cuando fue interceptada.
Tras contarle a su padre los planes para ese día sábado, la joven había salido de su casa cerca de las 8:30. horas. Después se le perdió el rastro. Su familia reportó su desaparición durante la jornada y un día después, la PDI encontró su cuerpo en el canal El Espino.
Por el crimen ya hay dos detenidos y un prófugo, el que, de acuerdo a lo señalado por la policía civil, está identificado y sería el "autor material" del hecho. Los detalles recopilados hasta el momento los contó hoy el subprefecto Pedro Calderón, jefe Brigada de Homicidios (BH) Metropolitana.
"De acuerdo al trabajo científico técnico efectuado por los oficiales de la BH el día de los hechos, lo que sumado a un amplio empadronamiento efectuado en el lugar, ubicación de cámaras de vigilancia, entrevista a testigos y familiares, se logró reconstruir los momentos en que la joven sale de su domicilio, que concuerda con lo manifestado por la familia", partió explicando el policía.
Rojas iba camino al centro cultural, añadió, cuando un sujeto -el que aún no ha sido aprehendido- la interceptó y obligó a ingresar a una casa abandonada. Dicha residencia, precisó, "es empleada por los delincuentes de sector para consumir drogas".
Fue allí dentro, a una hora aún no especificada, cuando la joven fue atacada por los imputados con un objeto contundente. Tras el crimen, añadió, las manos de la víctima fueron maniatadas y el cuerpo envuelto en cobertores: "Ella fallece y posteriormente es sacada del domicilio".
Lo que ocurrió después quedó registrado en distintas cámaras. Dos sujetos, uno de los detenidos y el prófugo, trasladaron los restos en un carro de supermercado al canal de regadío donde finalmente fueron encontrados por la policía civil.
"De acuerdo a los antecedentes que hemos reunido hasta el momento, no se conocían con la víctima. Estamos investigando sobre el móvil de este hecho, por cuanto podría ser un ataque sexual o el robo de una especie, como el celular de la víctima que se encuentra extraviado", agregó el subprefecto.
Y es que aún están pendientes los exámenes del Servicio Médico Legal (SML), que permitirán confirmar o descartar una agresión sexual. En tanto, el teléfono de Rojas también es clave por los investigadores, ya que tras el ataque, la familia de la joven recibió un mensaje de texto desde dicho móvil, donde esta supuestamente confirmaba haber llegado al centro cultural. De acuerdo a las sospechas de la PDI, habría sido el prófugo el autor del mensaje.
A la fecha, hay dos detenidos como coautores, quienes tienen antecedentes policiales por delitos como robo, lesiones y hurto, y que serán formalizados este martes por la Fiscalía Occidente. El tercer imputado está siendo buscado por la PDI.
