El secretario de Estado recalcó que se trabajó buscando "las mejores soluciones" ante las demandas del movimiento.
Héctor Yáñez, El Mercurio.
El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, defendió este martes la negociación que sostuvo con el movimiento No+TAG, pese a que el propio Presidente Sebastián Piñera reconociera que si hubiese podido elegir, no se habría sentado a la mesa con quienes bloquearon las carreteras durante las primeras semanas de la crisis social en Chile.
Ayer, durante una entrevista en la cadena radial Archi, el Mandatario afirmó que "si hubiera podido escoger, no habría tenido en esa mesa a quienes actúan al margen de la ley bloqueando las carreteras", en referencia a la serie de conversaciones que sostuvo el secretario de Estado con la agrupación.
Ante ello, Moreno aseguró a
Emol que "no conozco esas declaraciones del Presidente, pero en todo caso
nos hemos juntado con todos los que tienen que ver con este problema, con esta inquietud".
Asimismo, recalcó que se trabajó "extensamente", buscando "las mejores soluciones" ante las demandas del movimiento.
"Hoy día estamos trabajando en implementarlas, todavía no están implementadas, esperamos implementarlas a partir de las próximas semanas y que vayan en directo beneficio de personas que realmente tenían dificultades que hay que resolver", añadió, en medio de su participación en el seminario "Agenda del Sector Sanitario 2030".
“El que usa paga”
El titular del MOP también se refirió a la propuesta de la Asociación de Concesionarios de Obras de Infraestructura Pública (Copsa) para reducir las tarifas de los peajes de las autopistas urbanas e interurbanas y dijo que "en realidad, lo que a nosotros nos interesa es mejorar todos los sistemas de concesiones, pero queremos que se mantenga el principio de que 'el que usa paga'".
De esta forma, la autoridad explicó que los automovilistas deben seguir costeando estos servicios y "todo lo que significa construir las carreteras", señaló.
"Todas aquellas cosas que pudieran ser otros costos nos parece bien considerarlos, pero no aquellas cosas que son sustanciales a la construcción de las propias autopistas, esto permite que el Estado pueda invertir en el transporte público que moviliza a una gran cantidad de personas, que es un beneficio para todos", concluyó.