"Es un concepto que depende del Ministerio de Salud y que constituye fundamentalmente dar la posibilidad a poblaciones muy vulnerables de hacer cumplir el aislamiento, la cuarentena en circunstancias que en su propio domicilio no lo pueden hacer". De esta manera explicó el ministro Jaime Mañalich lo que encierran las residencias sanitarias, una iniciativa que impulsa el Ejecutivo y a la que quiere darle más alcance.
Así lo anunció la noche del domingo el Presidente Sebastián Piñera y lo reforzó este lunes el titular de Salud. "Tenemos 52 residencias sanitarias a lo largo y ancho del país, pero evidentemente tenemos que aumentar esta capacidad, sobre todo en la Región Metropolitana", señaló Mañalich.
En ese sentido, aseguró que hay casos en los que "lo ideal es que algunas personas abandonen por un periodo el lugar donde están viviendo y vayan a una residencia sanitaria para tener calor, confort, comida, atención de salud y psicológica, de manera tal de colaborar a que salgan adelante de esta tremenda crisis".
Así, el ministro solicitó "con mucha fuerza la colaboración de los municipios, de los alcaldes y alcaldesas, porque nadie mejor que ellos conocen sus territorios". "Necesitamos incorporar en esta cuarentena más cupos de residencias sanitarias para que efectivamente, en lugares donde no se puede cumplir un aislamiento adecuado en donde la gente vive, puedan trasladarse con todas estas seguridades", dijo.
"A través de la Mesa Social, donde están representados los alcaldes, vamos a hacer una petición de levantamiento de recursos adicionales para montar o utilizar recinos que ojalá estén ya habilitados —como antiguos internados, conventos o escuelas— para transformarlos en residencias", añadió. Según el ministro, las camas actuales con las que cuenta la red de residencias es de 2.339 cupos, lo que "es todavía bajo".
La prioridad estará puesta en las personas que viven en lugares vulnerables, condiciones de hacinamiento o en adultos mayores que requieren asistencia de terceros.
