Varias naciones de Sudamérica están hoy en alerta a raíz de la circulación de un Boeing 747 de la estatal venezolana Emtrasur, que el martes 7 de junio aterrizó en Buenos Aires. El avión habría sido adquirido a la empresa iraní Mahan Air -sancionada por EE.UU y Europa- y entre sus tripulantes habrían venezolanos e iraníes, estos últimos, supuestamente asociados al terrorismo.
Pero para entender la preocupación, hay que retroceder un poco en el tiempo, precisamente hasta inicios de junio, cuando el avión sospechoso despega desde Ciudad de México con una carta declarada de repuestos; hace escala en Caracas y luego se dirige a Argentina, al aeropuerto de Ezeiza. Sin embargo, por malas condiciones de visibilidad, debe aterrizar en Córdoba, para dos horas más tarde ir a Ezeiza.
El plan de vuelo presentado por la tripulación señalaba que despegarían hacia Uruguay, sin embargo, en dicho país se les negó el ingreso al espacio aéreo, por lo tanto debieron retornar a Argentina. Desde entonces, la aeronave está retenida en la zona de cargas de Ezeiza.
Uruguay negó el ingreso de la aeronave puesto que ya había sido alertado por Paraguay sobre sus operaciones. Esto, porque en Mayo el avión viajó desde Caracas a ese país, con una tripulación de 7 iraníes y 11 venezolanos, permaneciendo dos días en el país. "Desde que Paraguay informó y alertó, se pudieron hacer las averiguaciones, y hoy vimos que gran parte de esa tripulación tiene vínculos con terrorismo internacional. Uno incluso se operó la cara en Cuba, imagínense, parece una película", dijo el Presidente de ese país, Mario Abdo.
El 21 de junio, según consigna el diario La Nación, la fiscal federal de Lomas de Zamora, Cecilia Incardona, solicitó investigar el objetivo del arribo del avión sospechoso a país. Esto, puesto que "surgieron varios rastros que imponen la necesidad de proseguir la investigación respecto de Ghasemi Gholamreza, de toda la tripulación que de él dependía, de la aeronave y su carga, conforme las obligaciones del Estado Argentino para prevenir y sancionar hechos de terrorismo".
Asimismo, recalca la necesidad de indagar esas contradicciones y "circunstancias irregulares", para determinar "si el verdadero objetivo del arribo de la aeronave a nuestro país (Argentina) fue exclusivamente para transportar mercadería de autopartes, o bien si estuvo fundado en razones diferentes a las alegadas y constituya, eventualmente, un acto de preparación para proveer bienes o dinero que pudieran utilizarse para una actividad de terrorismo, su financiamiento u organización".
13 vuelos de Conviasa durante 2022
En Chile, también se levantó la sospecha por parte de algunos legisladores chilenos, radicada en que en los últimos meses algunos vuelos de dicha filial venezolana (Emtrasur) habría realizado viajes no regulados a Chile.
Según los integrantes de la comisión de Defensa de la Cámara de Diputados, Andrés Jouanett (IND-PR) y Francisco Undurraga (Evópoli) se habría detectado el aterrizaje de una aeronave de Conviasa el día 22 de junio en el Aeropuerto de Santiago. Sería un Airbus A340 proveniente de Caracas, con matrícula YV3533.
Según el documento al que accedió
Emol, la DGAC informó que el vuelo salió desde Maiquetía, Venezuela, con 89 pasajeros, mientras que 135 regresaron en el tramo Santiago-Maiquetía. Además, iban 17 tripulantes, la que no descendió del avión mientras estuvo en Santiago. Entre las observaciones, se detalla que al arribo, se desembarcaron 8 contenedores de maletas, con aproximadamente 450 de ellas; y a la salida, se embarcaron 10 contenedores, con aproximadamente 550 maletas. Ningún equipaje, tras ser sometido a rayos x, provocó observaciones.
Además, se reporta que Conviasa ha realizado 13 vuelos durante el 2022. En el caso específico de la aeronave YV3533, ésta ha realizado seis vuelos en la ruta Caracas-Santiago-Caravas; mientras que el resto de vuelos -con la misma ruta-, se han realizado con aeronaves con otras matrículas.
Los parlamentarios afirman que su intención es que las autoridades fiscalicen y revisen las características de esos 13 vuelos, así como todos los pasajeros que han entrado y salido en ellos. "A mí me parece que salir de Venezuela hoy no es tan fácil, conseguir un pasaporte tampoco; si alguien viene en avión debe pasar por Panámá y Colombia, pero no hay vuelo directo hoy día. Entonces la duda es ¿quiénes pueden venir en un charter?, si vienen como turistas, ¿por qué traen cinco maletas cada uno?, ¿quiénes son los que regresan a Venezuela?", dice el diputado Jouanett a este medio.
Por su parte, el diputado Undurraga agrega que también levanta sospechas el que Conviasa haya suspendido sus vuelos programados para los días 29 y 30 de junio, "justo en este momento en que empezamos a preguntar qué pasaba". Por eso, insiste es que "este es un tema que no está resuelto, y la respuesta de las autoridades no nos dejan conformes, por lo que no podemos eludir nuestro rol fiscalizador (...) queremos saber quiénes son esos ciudadanos, por qué vienen, qué actividades tienen en Chile", remarcó.
De todas formas, ambos parlamentarios dicen no estar iniciando una persecución al Gobierno ni tampoco querer especular respecto al vínculo que estos vuelos tendrían con la aeronave que está detenida en Buenos Aires, hasta que las autoridades se pronuncien al respecto; pero recalcan que hay serias dudas al respecto.
"Espero que este vuelo puntual, que gatilló dado lo que pasó anteriormente en Argentina y lo que dijo el presidente Abdo de Paraguay, no tengan nada que ver con Chile. El triunfo aquí no es que exista una actividad ilícita en este país por gente que viene en esos vuelos; ojalá nunca suceda, pero no por eso no podemos estar alerta", recalca Undurraga.
Comisión investigadora se vota hoy
El pasado 23 de junio, Jouanett envió un oficio a la ministra del Interior, Izkia Siches, para que se pronunciara respecto a las medidas que se adoptarán "para controlar aeronaves que ingresen a territorio nacional puedan tener entre sus tripulantes terroristas, disponiendo que la Policía de Investigaciones (PDI) realice un empadronamiento e investigue de manera pormenorizada sus identidades, e instruyendo a la Dirección Nacional de Aduanas la inspección de la carga, mercadería y eventuales valores existentes", indica el oficio.
77 firmas consiguieron sus impulsores para iniciar una comisión investigadora respecto a los vuelos de Conviasa a Chile
En paralelo, a inicios de julio, los parlamentarios expresaron su intención de crear una comisión investigadora para fiscalizar los actos del Gobierno relacionados a las operaciones en Chile de la estatal venezolana. Según comentó hoy a
Emol el diputado Jouanett, el martes pasado iniciaron el proceso de recolección de firmas, consiguiendo 77, mientras que se necesitaban 62.
"Esta es la comisión que más rápido y mas firmas tiene para constituirse; esperamos que hoy día se vote en la Cámara para que esta comisión pueda designar a sus miembros e inicie una investisgación por un periodo de 90 días", afirmó.
Respecto al oficio enviado a la ministra Siches, el parlamentario afirma que la secretaria de Estado "respondió con un documento reservado que le envía la PDI, pero puedo decir que no quedé muy conforme con lo que a ella le respondieron, es extremadamente procedental", remarcó.
De todas formas, para este próximo miércoles el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, está citado a las comisiones unidas de Defensa y Seguridad Ciudadana, junto a autoridades de distintos serviciso, como la PDI, la DGA, la Junta Aeronáutica Civil y Aduanas.