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Más rechazo que el Rechazo: El momento de Boric y sus cartas para atraer a los desencantados de su Gobierno al Apruebo

Según las últimas encuestas, la desaprobación del Mandatario supera en 10 puntos al apoyo que tiene la opción que desecha la propuesta de nueva Constitución. En ese contexto, expertos desmenuzan su estrategia para apuntar a esa diferencia.

25 de Agosto de 2022 | 08:05 | Por Felipe Vargas, Emol
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Aton.
Este jueves, el Presidente Gabriel Boric iniciará un nuevo despliegue en terreno, con una visita a la Región de Atacama, la cual se sumará a la serie de actividades que ha sostenido en medio de la campaña de cara al Plebiscito de salida del proceso constitucional, las cuales ha desarrollado tanto en la RM como fuera de la capital.

En total, desde que dio a conocer el plan que impulsará en caso de que se imponga el Rechazo en el referéndum el 15 de julio, el jefe de Estado ha recorrido una veintena de comunas en todo Chile, en las cuales ha subrayado la necesidad de que la ciudadanía vote informada, lo cual a juicio de la oposición ha sido intervencionismo electoral.

Asimismo, en este periodo, el Mandatario ha impulsado una serie de iniciativas clave de su programa de gobierno, como el copago cero en la salud pública, mejoras al plan Chile Apoya o las indicaciones a la iniciativa que busca rebajar la jornada laboral a 40 horas, las cuales fueron presentadas en una vistosa pauta en el Palacio de La Moneda.

Todas esas acciones, a juicio de los analistas electorales, tendrían un solo objetivo: Recuperar a las personas que lo apoyaron en la presidencial, pero ahora están desencantadas de su administración para que puedan votar Apruebo y no decantarse por el Rechazo, como una forma de castigar la gestión del gobernante.

De hecho, de acuerdo a la última encuesta Cadem, el 56% de los encuestados expresó su desacuerdo con la forma en que Boric ha conducido su administración, mientras que un 46% aseguró que votará Rechazo. Es decir, existiría un 10% de personas que no votaría Rechazo, pero que a su vez lo reprueban.

La decisión del Presidente de poner en juego su capital político en la campaña ha sido objeto de debate. De hecho, el jefe del comité de senadores de la DC, Matías Walker, sostuvo que "no es bueno para Chile que él aparezca derrotado la noche del Plebiscito (…) nosotros vamos a defender la institución del Presidente de la República".

Análisis a la estrategia

No obstante, para los expertos, el plan de Boric tiene pronóstico reservado. El cientista político y académico de la Universidad de Talca, Mauricio Morales, señaló a Emol que "el Gobierno ya lo dio casi todo. Si el Apruebo pierde, no será por culpa del Presidente. La responsabilidad recae exclusivamente en la Convención Constitucional".

En tanto, el decano de la Facultad de Gobierno de la Universidad Central, Marco Moreno, destacó que "lo que estamos observando es un movimiento táctico. Es decir, lo que va a hacer el Presidente en estos próximos 12 días no va a ser un conjunto de acciones que no tengan eficacia electoral".

"Probablemente están haciendo un ajuste en su estrategia, para poder calibrar mejor y apuntar mejor a las acciones que van a desarrollar para que tengan eficacia electoral. El Presidente no puede hacer todo y tiene que hacer una selección y en este minuto están escogiendo las batallas y escenarios para poder ser más eficaz", añadió.

Mientras, el cientista político, académico e investigador de Faro de la Universidad del Desarrollo, Miguel Ángel Fernández, comentó que "lo que muestran las encuestas es que la desaprobación al Gobierno y el Rechazo están íntimamente vinculados. Una hipótesis de por qué ocurre aquello es el rol y posición que ha tomado el Presidente".

"Él ha vinculado el destino del borrador a su propia gestión. La gran alternativa era emplear momentos como la franja para persuadir al electorado, pero la fragmentación del Apruebo y su falta de coordinación afectaron considerablemente la opción", dijo.

Morales añade que "la única posibilidad que tiene el Apruebo para conquistar a los desencantados, es precisamente a través del Gobierno. El desencanto está concentrado fundamentalmente en los segmentos más pobres que, coincidentemente, presentan una mayor tasa de indecisos".

"El proyecto de las 40 horas va en esa dirección. A estas alturas, y faltando sólo 12 días, el Gobierno no tiene muchos resultados que mostrar en materias económicas y de orden público. Por tanto, ese proyecto bien podría contribuir a reducir el desencanto y transformar eso en apoyo para el Apruebo", afirmó.

Según Moreno, "para poder revertir esta suerte de voto relacional que asocia la gestión del Gobierno con la opción del Apruebo o al Rechazo en términos de castigo a esa gestión, el Presidente tiene que buscar atraer nuevamente en estos 12 días que quedan de campaña a estos desencantados".

"Probablemente la discusión del proyecto de las 40 horas u otras iniciativas que en los próximos días puedan darse a conocer irían en esa dirección. Tampoco hay que descartar algo inesperado, como podría ser un cambio de gabinete, que forma parte de las acciones a las que puede echar mano para romper la tendencia", señaló.

A su juicio, en esta etapa "es muy importante hacer acciones que tengan un carácter más bien disruptivo, junto con el despliegue en el terreno, en lo cual el Apruebo trabaja bien. Van a tener que buscar una acción inesperada o no prevista, ese cambio podría cambiar el sentido de la balanza".

Finalmente, sobre si alcanza el tiempo para movilizar a ese electorado, añadió que "si, definitivamente, la gente está tomando su decisión cada vez más cerca del momento de la elección. Por lo tanto, si bien quedan 12 días de campaña, la gente va a tomar su decisión dos o tres días antes, por eso el efecto de arrastre a propósito del despliegue en el territorio puede ser un factor que les juegue a favor".

Una visión distinta planteó Morales, quien afirmó que "el efecto será marginal. La ciudadanía tiene tomada su decisión al menos en un 90%. Si la competencia es estrecha, entonces ese efecto marginal podría ser decisivo. El Apruebo necesita sacar ventaja en la zona central del país y, en específico, en los segmentos populares".

Finalmente, Fernández coincidió en que "a esta altura parece muy difícil que una maniobra comunicacional logre separar esa simbiosis que se auto provocó el Gobierno. Ello deja con poco campo de acción al Apruebo para desligarse de los aciertos y errores de la actual administración".