Una grave denuncia se conoció la jornada de este jueves, luego que quedara al descubierto un presunto caso de agresiones contra un niño de ocho años con síndrome de Down al interior de la Escuela Escuadrón de la comuna de Coronel, en la región del Biobío.
Esto, porque el menor de edad habría estado sometido a prácticas vejatorias como ser amarrado de manos y pies a su pupitre, al final de la sala de clases, cuando pasaba por periodos de hiperactividad o crisis, según denunció Cooperativa.
El hecho quedó al descubierto luego que el funcionario a cargo del menor de edad iniciara un periodo con licencia médica, y al llegar un reemplazo, éste se enteró de las conductas que se practicaban con el niño, pues sus propios compañeros le sugirieron que hiciera "lo de siempre" para tranquilizarlo.
Frente a ello, el alcalde de Coronel, Boris Chamorro, salió a condenar de manera tajante "cualquier tipo de acto de vulneración de derechos de nuestros niños y niñas. Como sostenedor de la educación municipal, no aceptamos ni aceptaremos ningún tipo de acción que atente en contra de la libertad de los niños y niñas de nuestras unidades educativas".
En esa línea, anunció "una querella criminal en contra de todos los responsables de este acto de la vulneración de derechos de nuestro niño de la Escuela Escuadrón".
En segundo lugar, planteó que instruyó una investigación sumaria, para lo que ya se ha designado un fiscal a cargo "y que de manera inmediata ha pedido la separación de funciones del equipo directivo del colegio Escuadrón para que se investigue la utilización y la buena aplicación de los protocolos que están estipulados por ley por parte del Ministerio de Educación y también por parte de la Defensoría de la Niñez".
Como tercera acción, el jefe comunal dijo que se entregará "el apoyo fundamental a la familia y sobre todo, a este menor de ocho años del colegio Escuadrón que ha sido vulnerado en su derecho tras los acontecimientos que ya todos conocemos". De hecho, aclaró que se reunió con Erika, la madre del menor y el propio niño afectado para entregar apoyo psicosocial ante esta "aberración" que se estaba cometiendo.
"Nuestra principal atención hoy día está concentrada en la familia y en el niño, y posteriormente esperamos que los tribunales y en este caso la investigación de parte del Departamento de Educación Municipal haga lo suyo en cuanto a los responsables. No vamos a aceptar que se utilice y se trate de normalizar un hecho tan repudiable como lo que estaba ocurriendo en este establecimiento educacional", sostuvo.
Asimismo, planteó que es necesario intervenir el establecimiento el Escuadrón para desarrollar un trabajo que permita mejorar la comunicación y "conocer la legislación y protocolos pertinentes para que este tipo de hechos no vuelva a ocurrir".
