Un balance positivo hace la vicepresidenta de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Susana Jiménez, respecto de las primeras dos jornadas de la gira por Europa. La exministra de Energía integra la comitiva de empresarias que acompañan al Presidente Gabriel Boric en su periplo por el continente viejo. Un viaje que ella misma califica como una oportunidad para generar mayores aproximaciones con el Ejecutivo. Esto, en un momento en que el debate tributario ha agudizado las discrepancias entre el Gobierno y el gremio.
En entrevista con Emol, la economista aborda la discusión del pacto fiscal y entrega su apreciación respecto a las declaraciones que vertió este viernes el Mandatario en la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE). Una instancia que, entre otras cosas, trascendió por la valoración que manifestó el Presidente sobre el desarrollo que alcanzó el país en los últimos 30 años.
¿Qué oportunidades presenta para Chile esta gira en Europa? Y ¿Cuánto ayuda para estrechar confianzas entre el sector privado y el Estado?
Estas giras son interesantes en cuanto uno puede mejorar o estrechar vínculos con inversionistas y empresarios extranjeros. Eso tiene, por un lado, la finalidad de poder mostrar en qué estamos en Chile, cuáles son las oportunidades que presenta para la inversión extranjera, como también, nosotros poder apreciar lo que se está haciendo en las distintas temáticas afuera y, sobre todo, nuestras reuniones con organizaciones empresariales nos permite también construir una agenda común y complementaria en temáticas que son transversales para las organizaciones empresariales.
En cuanto a tu pregunta sobre la vinculación con el Gobierno, yo creo que son oportunidades de estrechar también vínculos, generar confianzas diría yo, más que nada, porque es distinto una reunión protocolar, tradicional, que una gira en que uno tiene la oportunidad de tener conversaciones a veces algo más informales y que permiten ver que podemos tener a veces ideas en común, a veces discrepancias, pero siempre son con respeto y cada uno con su mirada con la mejor intención para construir la crecimiento de Chile. Entonces, yo creo que son buenas oportunidades tanto en la vinculación internacional como interna.
Ayer el Presidente, luego de destacar una serie de atributos sobre Chile, advertía que él no venía a vender un cuento respecto a que el país era perfecto para efectos de invertir. A su juicio ¿Cuáles son las oportunidades, pero también los escollos que presenta el país para atraer inversores?
Primero hay que rescatar que destacó que Chile era un país, un destino atractivo y confiable, y también hizo una referencia a lo que ha ofrecido también en las últimas décadas en cuanto a estabilidad, a reducción de la pobreza y apertura al mundo. Yo creo que eso es interesante porque permite también mirar para adelante, hacia no solo las actividades tradicionales que siempre ha mantenido, sino las que se están desarrollando con fuerza hoy día, y en ese sentido creo que el salir al mundo a contar sobre la potencialidad que tiene el litio, el despliegue que ya han tenido las energías renovables y las oportunidades que da el hidrógeno verde, es algo que es súper interesante de escuchar para los inversionistas extranjeros. Por lo tanto, yo creo que Chile tiene efectivamente muchas oportunidades y darlas a conocer es importante.
Ahora, tú me preguntas los principales escollos. Yo diría que están en que estamos hoy día en un proceso de discusión sobre nuestro marco constitucional, que por supuesto que es importante que cierre de buena manera. También estamos en discusiones importantes respecto a nuestra estructura tributaria, lo que el Gobierno ha llamado el pacto fiscal, la reforma de pensiones. Por lo tanto, son todos temas que todavía están abiertos y que, de alguna manera, pueden generar algún grado de incertidumbre, y a eso se suma temas ya más de eficiencia del Estado, todo lo que tiene que ver con la tramitación de permisos y que requiere una revisión. Son temas que cualquier inversionista extranjero va a estar mirando con interés porque son ciertamente, digamos, complejidades que tiene nuestro sistema para el desarrollo de inversiones, que generan plazos más largos y a veces incertezas.
¿Cómo se compatibiliza la captación de inversores con el suspenso en materia tributaria? Y, ¿cuánta responsabilidad ve que tiene el gobierno en la prolongación de ese suspenso?
El Gobierno tenía una agenda con una reforma tributaria que tuvo legitimas discrepancias en el mundo empresarial y, ciertamente, cuestionamientos desde el mundo político. Es la razón por la cual se rechazó la reforma tributaria hace un par de meses atrás, pero dio pie a una discusión más amplia que nosotros valoramos porque creemos que el eje de la conversación debe girar en torno a cómo logramos hacer que esta economía despegue. Estamos en una coyuntura en que el crecimiento económico, en el mejor de los casos va a ser nulo, o muy bajo, si es que no es negativo, con una situación de desempleo aún alto, tasas de interés elevadas y, por lo tanto, creemos que la discusión tiene que retomar la mirada que se ha dejado durante un tiempo en el crecimiento económico, que además es fuente de recaudación para el fisco.
Yo creo que el rechazo a la reforma y el debate público que se ha dado abrió las puertas para tener esta conversación. Nosotros, de hecho, tuvimos ya una reunión con el ministro de Hacienda sobre las oportunidades de elevar el crecimiento de largo plazo, la productividad, aumentar la formalización en la economía y, por lo tanto, esos temas de interés. También hubo una reunión en que se habló de eficiencia del gasto público, de modernización del Estado, algo que creemos que es clave para poder retomar el crecimiento y bueno, el Gobierno tendrá que ver si insiste con la reforma tributaria y qué cambios va a introducir para que esta tenga viabilidad en el Congreso. Nosotros hemos dicho públicamente que aumentar la carga tributaria de las empresas hoy día es muy complejo, hay que recordar el contexto, estamos discutiendo una reforma urgente como es la reforma de pensiones que eleva las cotizaciones al 6% con cargo a las empresas, se legisló en materia de jornada laboral, se legisló en materia de salario mínimo y, por lo tanto, hay que entender que en su integridad, estos son costos adicionales que si pueden generar efectos en la capacidad de inversión y crecimiento de las empresas.
¿No ve una suerte de contradicción en el Gobierno por el hecho que se plantee una reforma tributaria con estos elementos y al mismo tiempo se busque atraer inversión?
Elevar la carga tributaria ciertamente tiene que sopesarse con el efecto que eso tiene sobre la actividad productiva, sobre la capacidad de crecimiento y por eso es que nosotros hemos hecho bastante énfasis en que si lo que se busca es un aumento de recaudación, hay que abordarlo por otros lados y esas otras formas son precisamente alentar el crecimiento económico porque cada punto de crecimiento genera una recaudación del orden de 800 millones de dólares, y también atacando bolsones que hoy día no se están atacando suficientemente, que significan una merma en la recaudación, como es todo lo que es evasión o informalidad tributaria. Por lo tanto, yo diría que es por esa vía que debiéramos privilegiar el avanzar: La eficiencia del gasto público, sin duda, más aún con las discusiones y evidencias que hemos tenido en el último tiempo, cómo podemos racionalizar los programas mal evaluados. Entonces, hay una serie de caminos alternativos a una mayor carga tributaria que, como tú bien dices, si tiene efectos sobre el desarrollo económico.
La CPC, a propósito de estas tratativas ¿Está más cerca o más lejos de llegar a un consenso con el gobierno?
Nosotros cumplimos nuestro rol de analizar y dar nuestros comentarios a la autoridad en estas materias. A nosotros no nos corresponde, ni pretendemos ningún tipo de negociación, ni llegar a consensos necesariamente, porque ese es el rol que les compete a los parlamentarios que son los que votan esta reforma. Nosotros en cada uno de estos ejes que ha presentado el ministro del pacto fiscal, hemos dado nuestra opinión. Lo hicimos en la parte tributaria y mantenemos esa opinión y lo estamos haciendo en estos tres diálogos que nos ha pedido el ministro que son: Cómo crecer y aumentar la productividad, cómo mejorar la eficiencia del Estado y cómo abordar los temas de elusión y evasión. Creo que son todos aspectos en los que podemos avanzar y que el ministro, con sus reuniones con los distintos actores, que legítimamente manifiestan sus opiniones en este proceso, tendrán que ver la agenda que finalmente le presente al Congreso, que es donde tiene que ir a negociar.
Volviendo a la comparecencia de ayer del Presidente ante el circuito empresarial, ¿le llama la atención que el Mandatario haya relevado la herencia de los últimos 30 años cuando su sector ha sido particularmente crítico sobre el mismo?
Yo creo que es muy bueno que empecemos a tener ciertos consensos. Yo creo que los datos hablan por sí solos, los últimos 30 años, tal como lo señaló el Presidente, Chile logró bajar los niveles de pobreza de una manera realmente significativa y eso tiene un impacto social tremendo. Fue un período en que salió gente de la pobreza, aumentó la clase media, aumentaron los ingresos per cápita, mejoraron indicadores de educación, de escolaridad, de salud. Es decir, objetivamente yo creo que la discusión de los 30 años no tiene mayores lecturas y es bueno que así se reconozca de aquellos que fueron más críticos en su momento.
El Presidente también obviamente hace énfasis en aquellas deficiencias que aún persisten, tenemos un camino todavía por recorrer, pero lo importante es que tenemos que tener ciertos mínimos comunes que son importantes, defender la libre competencia, la importancia de la asociación público-privada, que la actividad económica liderada por el sector privado es el motor de la economía, que se necesita por supuesto una red de protección e ir mejorando justamente a través de la eficiencia del gasto público, la distribución de los ingresos, que necesitamos agendas pro inversión, pro crecimiento para que los próximos 30 años también logren redituar en la sociedad chilena. Así que yo creo que es interesante que él lo haya hecho explícito en su presentación, así como también es interesante que el Presidente valore explícitamente el proceso de apertura que ha tenido Chile con la firma de acuerdos comerciales, ya que estamos en Europa, la modernización de nuestro acuerdo con la Unión Europea, que debiera dar pie a mayores inversiones y certezas para atraer capital extranjero.
¿El Presidente la ha manifestado algún tipo de reparo o ha tenido la oportunidad de conversar con usted sobre el téngase presente que la CPC presentó al TC por la ley de delitos económicos?
Con el Presidente directamente no. Yo he conversado con algunos de sus asesores acá en la gira y básicamente lo que hemos querido transmitir y ser bien claros, porque a veces lo que sale en los medios no refleja realmente lo que esto es, que es un téngase presente, primero porque ha habido opiniones algo destempladas y nosotros somos enfáticos en reiterar que estamos a favor de una ley de delitos económicos y de sancionar cualquier tipo de abuso y de atentado contra la competencia.
Ahora dicho eso, esta ley o este proyecto de ley tiene deficiencias importantes y ahí la razón para el téngase presente en el tribunal constitucional, porque creemos que vulnera derechos fundamentales, tiene sanciones desproporcionadas y sobre todo, no respeta la igualdad ante la ley porque importa, más que el delito en sí, el cargo que pueda ocupar una persona o el tipo de empresa en la que trabaja. Por lo tanto, estamos muy conscientes, un téngase presente no es vinculante, pero creemos que era importante relevar esta discusión y pensamos que hay un espacio para que se aclaren ciertos puntos dentro de la ley con definiciones más claras, con tipificaciones más claras de los delitos y ciertamente reponiendo lo que es la igualdad ante la ley, que es un principio básico de cualquier sistema democrático.