La ministra vocera de Gobierno apeló al "sentido común" tras veto a la Ley de Usurpaciones.
El Mercurio
Este viernes el Ejecutivo ingresó el veto a la Ley de Usurpaciones y durante este sábado la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, comentó qué pasaría si el Legislativo no considera los cambios, pero apeló a que haya "sentido común" y que no se siga cayendo en el "populismo penal".
"Es un veto supresivo y, si no se aprueba, se mantiene la norma general que es la que existe de legítima defensa como todo ciudadano tiene frente a este tipo de situaciones que pone en amenaza su vida. Entonces, mantendríamos la legislación vigente por la forma que tiene este veto, pero es importante apelar al sentido común, porque yo creo que en estos debates no podemos seguir cayendo en el populismo penal", afirmó a CHV Noticias.
Según precisó, en el Gobierno entienden el problema de la seguridad, lo han tenido que enfrentar de manera "inteligente, estratégica, con recursos y mejor coordinación" y están "teniendo resultados, porque nos estamos tomando en serio el tema de la seguridad".
De hecho, por la misma "seriedad y responsabilidad", consideró que insistir en fórmulas como la legítima defensa privilegiada, que "nos va a llevar a que las policías no tengan que necesitarse, porque somos nosotros mismos los que habilitamos el uso de armas como defensa, o uso de terceros como defensa frente a la delincuencia, vamos a acrecentar la sensación de inseguridad, porque vamos a decir 'las policías no sirven, somos nosotros los que nos tenemos que defender', y si hay personas que tienen miedo frente a eso, se genera un problema mayor en cuanto a sensación de inseguridad y desprotección del Estado."
Por el contrario, entonces, remarcó que "nosotros necesitamos fortalecer las herramientas del Estado para que la gente esté y se sienta más protegida".
La secretaria de Estado enfatizó en que "el problema" que se generó en la discusión legislativa, "es que se estaba desvirtuando esto y estaba abriendo paso a generar una especie de ley de la selva, la ley del más fuerte para enfrentar este tipo de delito".
"Nosotros tenemos un Estado de Derecho y, la gracia de eso, es que cuando eres víctima tienes tu legítima defensa, pero son las policías las que tienen que actuar y la justicia es la que tiene que determinar las pruebas y responsabilidades, y no los ciudadanos. Lo que hacía la legítima defensa privilegiada era permitir responder frente a este delito con el uso de armas con terceros y eso iba a habilitar legalmente la confrontación violenta entre civiles, y en eso nunca estuvimos de acuerdo", acotó.