Esta semana ingresó al Congreso el proyecto de Ley de Presupuestos de 2024 para las distintas instituciones y ministerios del Estado. Entre ellos está la glosa destinada a Transportes, donde se propone un 10% de incremento de los recursos en comparación al año pasado. Si bien esta alza no es tan significativa como la de 2022, cuando fue del 26,4%, se elevó desde $1.573.244.638 (miles de millones) a $1.730.123.672.Las razones son varias, pero uno de los ítems que llaman la atención es el del financiamiento del sistema de transporte público de la Región Metropolitana. El sistema Red Movilidad (conocido como Transantiago) registró un aumento del 8,3% en comparación con el año pasado, y solo el subsidio permanente aumentó en un 17,9%, quedando en un total de $509.008 millones, $77 mil millones más de lo que fue este año. Además, ya no existe la glosa de inversión en "Transantiago-Red Movilidad", como venía siendo la tónica de los últimos años (y donde el año pasado inyectaron $20 mil millones, un 72% más que en 2022). Este año, se define en su reemplazo el ítem de inversión para la "Subsecretaría de Transportes", donde el presupuesto pasó de $92 millones a $258 millones (179% más), y la "División de Transporte Público Metropolitano", donde se bajó en tres mil millones el presupuesto, de $50 mil a $57 mil (6,9%). Si bien no es raro que un sistema de transporte sea subsidiado por el Estado, considerando la importancia que juega dentro de la movilidad de las personas en una ciudad, lo que preocupa a expertos es el monto que está alcanzando este subsidio, que desde que se implementó, en 2008, no ha hecho más que aumentar, en medio de una alta evasión y con la tarifa congelada entre 2019 y 2023.
