A fines de septiembre se confirmó la contaminación del Laboratorio Sanderson con la bacteria Burkholderia, causante de un brote de infecciones instrahospitaliaria que aún está activo.
En ese contexto, el Instituto de Salud Pública (ISP) tomó una serie de medidas. Entre ellas se ordenó el retiro de productos del mercado y "cuarentena preventiva" de algunos de ellos.
La coordinadora de gestión de la Agencia Nacional Medicamentos del Instituto de Salud Pública,
Alma Belmar, compareció ante la comisión del Senado e informó que a la fecha se han registrado 786 casos sospechosos y 563 han sido confirmados con alguna presencia de la bacteria o sus clones.
Además, Belmar comunicó que han fallecido 45 personas. En esa línea, el ISP confirmó la presencia de la bacteria en pacientes, productos y en la planta farmacéutica del Laboratorio Sanderson.
Por su parte, el subsecretario de Redes Asistenciales, Osvaldo Salgado, indicó que "en el caso de la Burkholderia, la mortalidad asociada es cercana al 1%. Cuando se habla de los fallecidos en estos brotes, en realidad se habla de pacientes que han fallecido con la presencia del germen, y no necesariamente porque han fallecido a causa de este".