Director nacional del Servicio de Migraciones, ministra del Interior y subsecretario de Prevención del Delito.
Emol
A raíz del homicidio del teniente de Carabineros Emanuel Sánchez, la bancada de diputados de Renovación Nacional, le solicitó al Presidente de la República, Gabriel Boric, evaluar la continuidad de la ministra del Interior Carolina Tohá.
Asimismo, pidieron la remoción del subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, y del director nacional del Servicio de Migraciones, Luis Thayer. A su vez, emplazaron al Senado a agilizar la tramitación del proyecto que tipifica como delito el ingreso clandestino.
A través de una declaración pública, los parlamentarios manifetaron que "la crisis de seguridad que atraviesa nuestro país suma un nuevo capítulo lamentable con la muerte del teniente Emanuel Sánchez Soto, quien de acuerdo a los principios y valores de Carabineros de Chile, perdió la vida actuando en defensa de su familia y terceros en la comuna de Quinta Normal".
"El caso deja en evidencia dos áreas en las que el Gobierno del Presidente Boric ha fracasado rotundamente (...) En efecto, la seguridad pública y el control migratorio son dos cuestiones en las que las confusiones ideológicas y la indolencia oficialista han derivado en un aumento histórico y alarmante de la delincuencia, particularmente de homicidios u otros delitos violentos, muchos de los cuales han sido importados por bandas delictuales extranjeras", agregaron,
En esa línea, manifestaron que "tanto la seguridad pública como el control migratorio son cuestiones de competencia del Ministerio del Interior y Seguridad Pública, por lo que parece evidente la necesidad de revisar la continuidad de quienes ocupan las jefaturas de los organismos pertinentes en dicha cartera de Estado".
A su vez, emplazaron al Mandatarioa a "evaluar la continuidad de la ministra del Interior y Seguridad Pública, Carolina Tohá, y definitivamente remover de sus cargos al Subsecretario de Prevención del Delito y al Director Nacional del Servicio de Migraciones. Estos últimos han sorteado el escenario más nefasto de Chile en las áreas propias de sus servicios, sin ningún tipo de responsabilidad con la complicidad del Jefe de Estado y de la ministra del Interior y Seguridad Pública, quienes, recordamos, tienen el deber constitucional y legal de velar por la seguridad y el orden público interior".