Opiniones diversas se manifestaron en el oficialismo sobre la condición que el Presidente Gabriel Boric puso a la promoción de cambios en el sistema político.
Pese a que hay consenso en que el Gobierno tiene la potestad de fijar sus prioridades legislativas, hay quienes defendieron el derecho que le cabe al Congreso de instalar los debates de iniciativa parlamentaria y de conciliar una tramitación en paralelo.
Así lo hizo la presidenta de la Cámara de Diputados y Diputadas, Karol Cariola, al apuntar que "se puede caminar y comer chile a la vez". "Hay debates políticos que están surgiendo y que tampoco se pueden aislar ni tapar, los debates están sobre la mesa y hay que seguir conversando", sostuvo.
Por lo demás, relevó que "la totalidad de parlamentarios y parlamentarias que somos entre la Cámara y el Senado, podemos trabajar en distintas materias y yo creo que eso no puede ser un elemento de inhibición del trabajo".
En conversación con Emol, el vicepresidente de dicho hemiciclo, Eric Aedo (DC), hizo eco de las declaraciones de Cariola. "La opinión del Presidente es tremendamente válida, pero el poder legislativo es un poder independiente y por tanto, existe la posibilidad de que senadores y diputados puedan presentar mociones parlamentarias en el marco de una reforma que permita enfrentar la fragmentación del sistema político", sostuvo.
Pero además, indicó que "la DC cree que hay que enfrentar esta fragmentación política". "Como dijo la presidenta de la Cámara de Diputados, se puede caminar y mascar chicle al mismo tiempo".
Quien defendió las declaraciones del Presidente, fue el diputado de Convergencia Social, Gonzalo Winter. "Yo eso no lo entiendo como un encadenamiento que es uno o lo otro, porque además, yo entiendo que la derecha ha señalado que ellos también consideran necesaria una reforma de pensiones y nosotros también hemos señalado que nos parece una reforma al sistema política. Lo que pasa es que tenemos diferencias en cada una, lo que no significa que sea una por otra, por lo tanto yo concuerdo con la Presidenta de la Cámara", formuló.
A su vez, el jefe de bancada de diputados del Partido Comunista, Luis Cuello, apuntó que en el debate "hay dos cosas relevantes. Lo primero es que debemos tener una mirada integral de la política, que no olvide su función: dar respuesta a las demandas del pueblo chileno. Entonces, el bloqueo de las reformas sociales por parte de la oposición y la necesidad de reformas institucionales para hacer más eficaz la democracia, no son discusiones separadas".
En segundo lugar, continuó, "lo prioritario es atender las urgencias sociales y la más postergada de todas es la reforma previsional. La falta de voluntad de la oposición para aprobarla es también un problema del sistema político que proviene de los estrechos vínculos de la derecha con la industria".
Más díscolo fue el diputado de la Federación Regionalista Verde Social, Jaime Mulet, quien reconoció que "tengo diferencias" con lo planteado por el Mandatario. "Hacer una reforma al sistema político, obviamente es complejo hacerlo ahora, pero lo que hay que hacer con urgencia son reformas al sistema parlamentario".
En esa línea, aseguró que con legisladores de oposición hay acuerdo en tres puntos, siendo uno de ellos "sancionar con la pérdida de escaños o de otra manera, quien se va de un partido una vez que es elegido".
También, indicó que hay consenso en que los comités parlamentarios "puedan establecer ciertas votaciones obligatorias a los parlamentarios" y de que se establezcan desincentivos a la fragmentación, como los que contempla el proyecto de ley que presentó para efectos de permitir la federación de partidos políticos.
"Hace más de un año que presenté un proyecto de ley en este sentido y el Gobierno, sumido en la contingencia, no le ha puesto urgencia ni buscado alternativas", acusó, sobre la moción que contó con el respaldo de todos los partidos del Socialismo Democrático.
De hecho, Mulet presentó la iniciativa de ley al ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde, en mayo del 2023, con la compañía de los diputados Undurraga y Aedo (DC), Lagomarsino y el presidente del Partido Radical, Leonardo Cubillos.
Con todo, las opiniones encontradas en la Alianza de Gobierno van a contrapelo del objetivo que busca La Moneda de alinear a las colectividades en una sola postura respecto a la reformulación del sistema político.