Para el 5 de junio se prevé una reunión del comité asesor del Puente
Chacao, que encabeza la ministra de Obras Publicas (MOP), Jessica
López, ocasión en que se oficializaría un nuevo retraso en la fecha de entrega de la estructura, la mayor en ejecución en el país y que debió estar terminada en 2020. La megaobra conectará la Isla Grande del archipiélago de Chiloé, entre Chacao y Pargua, en un trazado de 2,7 kilómetros, disminuyendo los tiempos de viaje que, dependiendo de las condiciones, pueden extenderse hasta por 45 minutos o más, a solo 3 minutos. Según el contrato inicial, del que la Contraloría tomó razón en 2014, la iniciativa suma más de seis años de retraso y pese a que se trata de un documento suscrito a suma alzada, ya experimentó un aumento de costos atribuido a "obras extraordinarias", justificadas en cambios que sufrió el proyecto para una mayor resistencia sísmica tras el impacto de los terremotos de 2010 y 2016. Ahora, el constructor de la obra, el Consorcio Puente Chacao (CPC), que en la práctica es casi exclusivamente la coreana Hyundai, pidió una nueva ampliación de plazo y aumento de costos. "CPC planteó la necesidad de extender los plazos aduciendo los impactos que ha tenido el contrato por la pandemia de covid-19, por las restricciones que se generan a partir de las condiciones climáticas extremas, la navegabilidad en el canal de Chacao y sus efectos en los rendimientos constructivos", respondió el MOP por escrito, junto con señalar que "todos los antecedentes estan siendo analizados y se tomará una decisión basada en los méritos de los argumentos planteados". Una decisión que deberá luego ser visada por la Contraloría.