En horas de anoche, un funcionario de Carabineros, que se encontraba de civil, fue víctima de una encerrona en la comuna de San Miguel, Región Metropolitana. Durante el ilícito, el efectivo policial forcejeó con uno de los delincuentes, perdiendo su armamento.
El inspector Javier Marchant, de la Brigada de Robos Occidente de la PDI, señaló que los hechos ocurrieron cuando el policía -de grado cabo segundo- se encontraba junto a su pareja y un grupo de amigos en su vehículo particular, con quienes transitaba por calle Chiloé con San Nicolás.
Ahí, un segundo vehículo interceptó el móvil y al menos cinco delincuentes, algunos de ellos portando armas de fuego,
intimidaron a los ocupantes. "Ante tal situación, el funcionario Carabinero se identifica como tal y
se produce un forcejeo entre uno de los autores del robo", dijo Marchant.
"En dicho forcejeo, ambos pierden sus armas de fuego, quedando el arma del funcionario dentro del vehículo en el que se movilizaba", agregó.
En ese contexto, el policía le arrebató el armamento a uno de los antisociales y percutó disparos con el objetivo del repeler a los atracadores. "Los autores del robo también efectúan diversos disparos, los cuales no impactaron a personas o transeúntes del lugar, huyendo todos a bordo de los dos vehículos", detalló el inspector.
En tanto, los acompañantes del funcionario policial sufrieron el robo de sus teléfonos celulares, documentos personales y dinero en efectivo.
Por instrucción de la Fiscalía, personal especializado de la PDI quedó a cargo de las diligencias investigativas del caso. Marchant afirmó que en el sitio del suceso se encontró una "gran cantidad de evidencia balística".