Mediante una misiva firmada por 13 antiguos ministros de Relaciones Exteriores de diversos países de Latinoamérica, entre quienes destacan dos rostros nacionales: José Miguel Insulza y Heraldo Muñoz, las ex autoridades, expresaron su acuerdo con la misión de la ONU en Venezuela.
Esta declaración condenó hace pocos días la "falta de independencia e imparcialidad" de Tribunal Supremo de Justicia, y que tanto este órgano como el Consejo Nacional Electoral han "desempeñado un papel dentro de la maquinaria represiva del Estado".
Según se lee en el documento que expresa el pensamiento de antiguos cancilleres de Argentina, México, Ecuador, Perú, Colombia, Paraguay, Brasil, Uruguay y Panamá -además de Chile- el pronunciamiento del TSJ "avalando los resultados electorales en favor de Nicolás Maduro no tienen validez, además de ser inconstitucional".
Tras lo anterior manifestaron su apoyo a los "esfuerzos diplomático de facilitación para una transición democrática y creemos que, para ello, el régimen venezolano debe respetar la soberanía popular expresada en las urnas y publicar las actas de votación desagregadas".
Lo anterior, para que estas "sean sometidas a verificación independiente con presencia internacional, según lo manifestado por organismos internacionales y líderes de nuestra región y del mundo".