Para la noche de este miércoles se espera la llegada del huracán Milton -de categoría 5- al estado de Florida. La preocupación es enorme, son miles las personas que han sido evacuadas de sus hogares debido a su "enorme peligrosidad". De hecho, el mismo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, advirtió que este ciclón "podría ser el peor huracán que azote a Florida" en 100 años.
Según informó este miércoles el cónsul de Chile en Miami, Daniel Ortíz, son cerca de 25 mil los chilenos que se encuentran en este estado, en el que las instrucciones entregadas por las autoridades norteamericanas han variado dependiendo de la cercanía con el lugar donde se espera que llegue el huracán.
Miami se encuentra a 300 kilómetros aproximadamente del "ojo del huracán", por lo que la alerta es de "tormenta tropical". Sin embargo, sus ciudadanos también han tenido que tomar algunas precauciones. Según contó el chileno que se encuentra en Fort Lauderdale, Javier Echeverría, la policía no ha entregado ninguna instrucción específica en torno a evacuar la zona, sino que han solicitado a las personas que junten agua, alimentos no perecibles, que carguen las linternas y baterías externas, además de que se encuentren preparados ante posibles cambios.
"En el supermercado se acabó el agua embotellada hace un par de días, el papel higiénico y el pan, porque son las cosas con las que las personas se abastecen. El tema aquí no es el momento exacto del huracán, son los días posteriores", dijo, agregando que se pueden producir cortes de luz.
Así, explicó que ni en Miami, ni Fort Lauderdale, ni West Palm Beach, los tres condados que corresponden al sur de Florida, "ha habido orden de evacuación".
En Riverview, Tampa, se encuentra de vacaciones la chilena Lorena Miki, quien comentó a CHV que incluso "pensé en adelantar mi vuelo, pero fue imposible. El trayecto que debería tomarme una hora se está demoran 6 o más (…) la verdad es que moverse por la ciudad es algo imposible".
Así contó que "para alguien que nunca ha vivido esto es súper extraño. Yo me asusté mucho" y explicó que no evacuó debido a que se encuentra en la zona B. "Está delimitado por zonas: A, B, C y D. Hasta ayer se había decretado evacuar las zonas A y D. a eso de las 20 horas se anunció también que la zona C tenía que evacuar (...) hasta ahora se nos ha pedido tener comida, bebidas y estar resguardados en las casas".
Tras lo anterior, comentó que algunas personas "están súper preparadas", quienes la hospedan "saben de emergencias. Estar con otras personas ha sido más tranquilizante que vivirlo sola. Ayer como que me puse a llorar y no sabía qué hacer".
De esta manera, contó que los residentes la aconsejaban al estar más familiarizados con la situación, quienes le decían que "estamos acostumbrados. Esto es como algo habitual para nosotros". Aun así, a pesar de la "calma" que hay, indicó que "los supermercados eran así como en modo pandemia, colas enormes, los carros estaban llenos, la gente se llevaba agua, papel higiénico y productos no perecibles (…) era fuerte ver las góndolas vacías".
Finalmente, explicó que el domingo comenzaron a llegar las primeras alertas, es decir, tres días de prevención. "Empiezan a salir todo el tiempo las alarmas, y ojo, en inglés y español", comentó, agregando que las personas recurren constantemente a aplicaciones donde se evidencia la evolución del huracán y la zona en que la está.
Roberta Fassino, una chilena que se encuentra de viaje por el estado de Florida, se trasladó a Orlando durante estos días. Desde ahí comentó que su vuelo para regresar a Santiago fue cancelado dos veces.
"Yo me volvía hoy (9 de octubre) y me cancelaron el vuelo como medida de seguridad por si llega a pasar algo en el aeropuerto. Tenía otro vuelo de vuelta para mañana (10 de octubre), el que también me cancelaron. Por ahora, mi retorno sería el viernes 11 desde Miami. El aeropuerto lo cerraron hasta mañana", contó, agregando que su apertura dependerá de cómo evolucione la situación.
En cuanto a las condiciones meteorológicas de Orlado, comentó que a eso de las 16 horas comenzó a llover y que actualmente las precipitaciones aumentaron en su intensidad, sin embargo, aseguró que es como "cuando llueve en el Caribe" y que no es un escenario demasiado anormal. Cada cierto tiempo "aparecen en nuestros teléfonos alarmas. La última nos avisó que hay toque de queda desde las 20.00 horas hasta las 10.00 de este jueves", informó.
Además, explicó que por este medio es por donde las autoridades anuncian la información, mediante alarmas constantes con actualizaciones a los teléfonos.
Hace pocas horas concurrió al supermercado para comprar los productos necesarios para estos días. "Hay menos caos que cuando en Chile anuncian que van a cortar la luz y el agua", agregando que si bien existía menos provisión de agua embotellada y papel higiénico, aún había unidades suficientes.
Finalmente, mencionó que la mayor intensidad -según le informaron- para Orlando se espera a las 01.00 horas de este jueves.