Probamos la tercera edición del Moto G, el teléfono que revolucionó la "gama media"
El nuevo smartphone de Motorola incorpora una mejor cámara y un diseño que lo vuelve resistente al agua.
26 de Septiembre de 2015 | 09:33 | Emol
SANTIAGO.- Cuando Motorola presentó su línea 2015 de smartphones a fines de julio, parte importante de la atención fue a los nuevos modelos del tope de línea Moto X, con sus especificaciones de última generación y batería de gran tamaño. Pero lo cierto es que la verdadera "joya" de la serie es el Moto G, el teléfono más económico de los anunciados en esa ocasión.
Presentado hace poco menos de dos años, el Moto G volvió conocido el concepto de "gama media", ofreciendo buenas prestaciones a un precio más económico. Y su tercera generación, disponible en Chile desde hace algunas semanas, repite la fórmula.
Varias cosas cambian en el nuevo G, partiendo por el diseño, con curvas más suaves y una construcción que se siente más Premium, pese a mantener el diseño plástico de los modelos anteriores. Un detalle importante está en la parte trasera, con carcasas intercambiables (vienen tres con el teléfono). Además, el nuevo diseño le permite ser resistente al agua, pudiendo ser sumergido por hasta 30 minutos a un metro de profundidad.
Tal como ocurrió en las generaciones anteriores, el Moto G apuesta por un buen rendimiento basado principalmente en el uso de una versión "casi pura" de Android. Es lo más cercano a la visión de Google fuera de la línea Nexus, manteniendo el diseño planteado por la compañía del buscador y sumando funciones que después de un tiempo se vuelven costumbre: girar la muñeca para abrir la cámara y dos movimientos cortos (como si se cortara el aire con un cuchillo) para encender la linterna.
Son cosas pequeñas, pero se agradecen en la experiencia y le dan al teléfono la sensación de un producto más Premium.
En rendimiento, el smartphone no presenta problemas. Es capaz de reproducir video en HD y correr juegos de alto rendimiento gráfico sin mostrar retrasos, aunque al tener muchos programas demandantes abiertos al mismo tiempo, puede mostrar cierta lentitud.
En relación a la pantalla, esta tercera generación mantiene el display de 5 pulgadas y resolución 720p de la edición 2014, suficiente para arrojar buenos resultados en video y lectura de texto, aunque a veces los colores se pueden ver un poco suaves. Por otro lado, su cámara –una de las mejoras más importantes según Motorola– con un sensor de 13 megapixeles logra mejores resultados que la versión anterior pero no se compara a la calidad de equipos más caros.
El Moto G tiene sus sacrificios. No cuenta con carga rápida o inalámbrica, ni una pantalla QuadHD, ni video en 4K, ni una construcción metálica. Estas son características que sí están presentes en equipos más caros, pero que en el fondo no son realmente necesarias. El nuevo smartphone de Motorola ofrece una experiencia más que satisfactoria para el rango de precio (a pesar de que cada año llega más caro a Chile) y por eso sigue dominando la cada vez más competitiva gama media del mercado.