SANTIAGO.- Durante 17 años, la iniciativa Andes ha trabajado en un proyecto que busca crear el mayor laboratorio subterráneo del hemisferio sur y el primero en Latinoamérica. Se trata de una colaboración entre Chile, Argentina, Brasil y México para la construcción de esta instalación, algo que aún no recibe la autorización por parte de Chile.
Una de las principales características de este edificio ideado por Andes, sigla para Sitio de Experimentación Profunda de Agua Negra (en inglés), es que se situará a una profundidad aproximada de 1,6 kilómetros por debajo de la roca de la Cordillera de Los Andes, transformándose en uno de los tres más profundos creados en todo el mundo.
¿Por qué es importante que sea subterráneo? "Tiene que ser subterráneo porque se busca hacer experimentos de señales que son muy sensibles, por ejemplo, la medición del flujo de neutrinos que viene del Sol", explica a Emol el profesor de la Universidad Federico Santa María y coordinador en Chile de Andes, Claudio Dib, y explica que "son [señales] muy débiles, entonces es necesario ocultarse bajo tierra para proteger el laboratorio de los rayos cósmicos que llegan permanentemente que formarían un ruido que impediría medir las señales".
"Cuando uno busca señales de neutrinos, digamos que uno llegara a detectarla, sería una señal que ocurre una vez cada cinco horas, mientras que los rayos cósmicos llegan 10 por segundo, entonces, obviamente queda completamente tapada la señal que uno quiere, entonces tiene que esconderse bajo tierra", añade.
En este laboratorio también se realizarían experimentos de búsqueda de materia oscura, investigaciones en geología, geofísica, biología en ambientes extremos, e incluso sobre el impacto de diferentes fenómenos y situaciones en el medio ambiente.
La creación de estas instalaciones generaría una colaboración latinoamericana, algo "similar al ejercicio que hizo Europa cuando estableció el laboratorio CERN, que es un laboratorio de propiedad europea, que no es de ningún país específico, aunque está en Suiza, pero pertenece a Europa". En este caso, Andes, sería de los países latinoamericanos que se comprometan en su desarrollo.
Las demoras del gobierno para el laboratorio
A pesar de que el proyecto comenzó a ser ideado en 2010 y el Ministerio de Ciencia de Argentina lo aprobó y posicionó como prioridad en 2012, las autoridades chilenas aún no entregan su aprobación para construir el laboratorio que permitiría nuevos focos de desarrollo científico del país.
"[El gobierno argentino] aprobó a nivel ministerial la inclusión del laboratorio, pero eso mismo en Chile ha faltado", lamenta Dib. "En todas partes encuentran muy buena la propuesta, pero tiene que haber una expresión formal de aceptación, de que a Chile le interesa formar parte de esta iniciativa".
El científico, quien detalla que el gobierno ya ha recibido la invitación de Argentina para colaborar en este proyecto, cree que "decir que no [al laboratorio] es un error estratégico muy grave, porque esto es algo muy valioso para Chile y para el desarrollo del futuro de Chile".
"Las consecuencias de decir que no, probablemente sea que Argentina lo haga por su cuenta y nos deje afuera que también es muy malo para nosotros", puntualiza.