Científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts (
MIT) presentaron ayer un estudio en el que demostraban cómo un
guante de bajo costo, recubierto con una red de sensores, podría reconocer objetos por medio de la presión, y ser utilizado en prótesis o robots, entre otros.
Se trata del proyecto
Scalable TActile Glove (STAG), del Laboratorio de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial, que creó este dispositivo de bajo costo, el cual a través de
550 sensores de presiónpuede transmitir información en tiempo real.
En detalle, el guante capta cambios de presión a través de una red de
32x32x sus fibras conductoras —conocida técnicamente como una Red Neural Convolucional—, las cuales con un algoritmo procesan los datos de sus sensores y
los hacen coincidir con objetos específicos para identificarlos.
“La información táctil recogida se proyecta sobre la forma de una mano humana, para que podamos entender fácilmente el contexto espacial”, explicó el director de la investigación,
Subramanian Sundaraman, al diario español
ABC. Y añadió: “Se podría considerar que
el guante es como una cámara deformable que mide espacialmente las presiones o las fuerzas, lo que no es muy distinto a lo que ocurre en el mundo natural”.
El sistema, que sólo cuesta
US$10 dólares y fue publicado por
Nature , podría mejorar la comprensión del funcionamiento del tacto y así el control de las manos. Información que para algunos investigadores, podría utilizarse para incorporar sensores táctiles a miembros artificiales o partes mecánicas, y así revolucionar el
desarrollo de prótesis y manos robóticas.
La red nerviosa de los mamíferos, dicen algunos, es todo un prodigio. En ella miles de millones de sensores distribuidos por la piel envían mensajes a nuestro cerebro, discriminan qué es importante y qué no, siendo
clave para nuestras experiencias e incluso para la supervivencia.