El Mercurio (Archivo/Imagen referencial)
Un algoritmo ha demostrado ser capaz de completar el Cubo Rubik, este juego con tramas de colores que debe armarse para formar placas homogeneas, más deprisa que cualquier humano: aproximadamente en 20 movimientos frente a 50. Y ha aprendido a hacerlo solo.
El sistema de inteligencia artificial creado por investigadores de la Universidad de California Irvine (UCI) -denominado DeepCubeA- es un algoritmo de aprendizaje de refuerzo profundo (deep learning) que puede encontrar la solución para organizar un Cubo Rubik en una fracción de segundo, sin ningún conocimiento de dominio específico o entrenamiento en el juego por parte de los humanos.
Esta no es una tarea sencilla, ya que el cubo tiene caminos de finalización numerados en miles de millones, pero sólo un estado objetivo, cada uno de los seis lados que muestra un color sólido, que aparentemente no se puede encontrar a través de movimientos aleatorios, según explican los creadores del algoritmo, que publican su trabajo en Nature Machine Intelligence.
DeepCubeA resolvió el 100% de todas las configuraciones de prueba, encontrando el camino más corto hacia el estado de la meta aproximadamente el 60% de las veces. El algoritmo también funciona en otros juegos combinatorios como el rompecabezas de baldosas deslizantes, "Lights Out" y "Sokoban".
Este avance "puede derrotar a los mejores jugadores humanos de ajedrez y "Go" del mundo, pero algunos de los rompecabezas más difíciles, como el Cubo Rubik, no se resolvieron con computadores, por lo que pensamos que estaban abiertos para los enfoques de la inteligencia artificial", destacó Pierre Baldi, académico de informática de la UCI y autor del trabajo.
"La solución para el Cubo Rubik implica un pensamiento más simbólico, matemático y abstracto, por lo que una máquina de aprendizaje profundo que puede resolver este enigma se está acercando a convertirse en un sistema que puede pensar, razonar, planificar y tomar decisiones", agregó.
Uno de los puntos que destaca el equipo detrás de esta inteligencia artificial es que en muchas oportunidades sólo necesitó de 20 movimientos, "la cantidad mínima de pasos" para resolver los enigmas.