Aunque quiere descansar de las tres temporadas de teleseries, sus planes profesionales son muchos. Estrenar una obra de teatro, hacer cine y conseguir un protagónico, entre otros. Mientras tanto, termina las grabaciones, piensa en México y da algunos adelantos del final de "Gatas y tuercas".
-¿Has hecho algo de teatro, con estos horarios de grabación de las teleseries?
“Estoy ensayando ahora. A mí igual me queda tiempo, por suerte, porque no estoy haciendo un papel tan protagónico como los otros cabros que están todos los días grabando; a mí me quedan unos días libres a la semana.
“En las dos primeras teleseries no hice nada de teatro, porque quería estar enfocado en esto, para aprender, para conocer, para acostumbrarme al lenguaje que es distinto; empezar a acomodarme con las cámaras; hay que aprender bastante, entonces quería estar enfocado sólo en eso”.
-¿Y esta nueva obra?
“Se llama "Los Culpables" y la escribió un amigo mío que es radio terapeuta del cáncer. Esperamos estrenarla en mayo en el Teatro de Lastarria. Estamos trabajando en eso, ensayando todas las tardes.
“Es un proyecto súper bonito, una compañía de artes integradas: con músicos del Conservatorio de la Chile, con música muy bella, que ya está escrita; con bailarines, con muñecos, con actores…”
-Ah, en grande.
“Sí, poh. Se viene en grande”.
En teatro ha trabajado en cinco obras profesionales y algunas de la escuela, pero después de su experiencia en “Nada”, dice haber terminado con poco desilusionado del teatro.
-¡Qué raro! ¿por qué?
“Porque uno trabaja mucho y es ingrato, la gente no lo va a ver, se pasan malos ratos. La verdad, terminé bien cansado de esa experiencia, por eso no quise hacer teatro durante un tiempo”.
-¿Por qué volver, entonces?
“Porque ahora estoy haciendo algo que lo encuentro tan mío, tan necesario de ser hablado en la sociedad…”
-¿Tiene algo que ver con el cáncer?
“No con el cáncer propiamente tal, pero sí analógicamente, porque se trata de cómo la sociedad va demacrando al hombre. Por ejemplo, mi personaje es como el ocaso de la belleza; cómo te va royendo el mundo, la sociedad, la sed de tener cosas, la sexualidad (la ambición de tener a todas las mujeres) y no ser capaz de enfrentar un amor verdadero, por inseguridad, por querer estar siempre asegurándose el piso y no sufrir… Esas cosas van enfermando al ser humano y por ahí yo creo que está bien relacionada con el cáncer.
“Estoy seguro, además, que va a ser uno de los grandes montajes de este año, va a ser bien renombrado, le tengo toda esa fe”.
-¿Cuáles son tus proyecciones?
Se queda pensando un buen rato. “Seguir trabajando en televisión; tengo ganas de hacer cine y hay un par de propuestas dando vuelta; tenemos unos cortometrajes stand by, que los vamos a filmar en 35 milímetros, y teatro. Este año estoy totalmente enfocado a Los Culpables y esa es mi máxima proyección este año. Ojalá poder hacer un protagonista en la próxima teleserie. Esa es otra de mis metas para este año”.
-¿Un galán?
“No, me da lo mismo… quiero un rol importante”.
-Pero igual te has destacado en los personajes que has hecho hasta ahora ¿cómo los creas?
“Los personajes los saco mucho de mí y de mis amigos. Los dialectos y las tallas que uno echa, son códigos: el que las ve y las conoce, se va a reír, y los demás lo van a encontrar simpático".
-¿Y Pedro, de "Gatas y tuercas"?
“En este personaje trabajamos harto con Herval (el director) y con el asistente, con el Quique, para tratar de diferenciarlo de los otros; tratar de hacer algo juvenil, con chispa, con energía.
“Lo que quise hacer… es que, en el fondo, lo que uno tiene que pensar es en el público que lo va a ver. ¿Qué me gustaría ver a mí de un radio operador que va a tener un rollo con unas chiquillas y todo? Es que sea alguien simpático; que sea un relajo, un respiro en el drama, eso va a ser siempre muy bien aceptado”.
-¿Te vas a quedar con la Europa?
“Yo creo que sí y me la merezco, además… siiii”.
-¿Y sufres por tu amiga Olivia?
“Sí, poh, estamos ahí, tratando de ayudarla”.
-Es que Joaquín es muy malo.
“Es malo, pero no es tan malo, al parecer; porque yo creo que Olivia lo ha hecho cambiar. Realmente lo ha hecho cambiar, le tocó como sus fibras más sensibles”.
Cuenta que son un equipo súper afiatado y muy amigos; de hecho, pasaron el año nuevo juntos en una playa en el sur. “Hicimos un corderito en un horno de barro, una rica comida e hicimos fiesta, todos juntos”.
