Diego nació el 11 de febrero de 1976 y es el tercero de cinco hermanos. Antes de él, un hombre (Felipe) y una mujer (Francisca) que tienen un año de diferencia entre ellos y cinco con Diego, y, después, María Paz y Álvaro que también tienen poca diferencia entre ellos y cinco con el hermano actor.
Le gusta mucho leer y escuchar música. También la natación, el golf… "No sé, igual hago hartos deportes. Ahora, en invierno, desde chico que esquío, pero ahora me pasé al snowboard. También deportes náuticos en verano: esquí, buceo, surf. Me gusta hacer de todo. Estoy cada día más pendejo, igual".
-¿Cómo?
"Tirándome pa' debajo de los cerros, haciéndome unas heridas gigantes. El otro día unos pacos me sacaron un parte por andar en skate en la calle. (Se ríe, como avergonzado) ¡Cada día más pendejo! Y no sé por qué, pero no me hago ningún problema".
-¿Qué es lo que más te gusta en música?
"Desde chico he sido bueno para escuchar música, desde la clásica –Mahler-; jazz , Thelonius Monk; me gusta Brand New Heavies; está muy bueno también Herbie Hancock; me gustan los Velvet Underground, me han gustado de chico; cuando era medio hippie, firme con los Beatles y la música andina. No le hago el asco a nada en música".
-¿También la cebolla?
"No soy muy cebollero, pero hay algunas canciones romanticonas que son como golpeadoras y uno no se puede hacer el leso con eso… ¡no! Hay canciones medias fletas que son bueeenas (y tararea 'Tiempo de Vals' de Chayanne)".
-¿Y rock?
"Por cierto; fui fanático de Led Zeppelin… muy, muy fanático".
-Entre todas estas aptitudes y búsquedas ¿tocas algún instrumento?
"Tengo buen oído, toco un poquitito de todo, pero nunca he sido muy constante; he pasado por varios, igual, piano, flauta, guitarra, charango en la época media hippona".
Tienes que ser bien hiperkinético para que te echaran del Saint George.
"Siií, desordenao, bueno pa' echar la talla, pa' l chiste, anotaciones en el libro. Una vez me agarré a combos y me dejaron condicional. Después me robé unos dulces del quiosco y me suspendieron por robo, que en el colegio era gravísimo y, como estaba condicional, fue cancelación de matrícula y ¡fuera!"
-¿Qué lees?
"De todo también. Me ha gustado siempre leer, de chico; tenía una nana muy bacán que era la Mariela. Por la diferencia de edad con mis hermanos, los mayores iban al colegio y los chicos no nacían; yo no fui al jardín y me quedaba harto con esta nana… era muy buena onda conmigo… me regaló una batería con su sueldo ¡imagínate!
"Bueno, ella me regalaba libros de magia y yo hacía nudos de magia".
-Una infancia súper estimulada.
"Súper. Además, éramos socios del Country y vivíamos en una de las casas que lo rodean y con puerta al Country, así que era mi jardín. Puedo decir que tuve una infancia muy, muy estimulada. Así como me regalaba libros de magia, me compraba de pájaros, de banderas y yo me las sabía, lo pasaba la raja, y…"
-Y ahora qué lees, te quedaste pegado.
"Ah, eso era. Ehhh, me estoy leyendo un libro de cuentos, a mí me gusta mucho Milan Kundera, me estoy leyendo éste (lo saca de su bolso), "El libro de los amores ridículos", que es un libro de cuentos súper ridículos relacionados con el amor, que es algo a lo que este weón le pega heavy. Esto por el momento, pero siempre estoy alternando. Tengo una biblioteca chica en mi casa y he ido juntando libros".
-¿Vives solo?
"Sí, desde este año. O sea, me fui de la casa de mis viejos años atrás; viví con amigos; viví por aquí y por allá; me iba a comprar una casa; me iba a casar, no me casé".
-¿Por qué?
"No me casé no más y todo bien".
-¿Tienes ratos de soledad con esta vida tan ajetreada?
"Sí algunos. Pero he tenido suerte; han sido hartos proyectos que he desarrollado este año, pero no se me han topado, por suerte. Y quizás no se vuelve a repetir, tampoco. Es muy raro hacer dos películas en un semestre".
-¿Alguna frustración?
"Al principio era más frustrante, el tema de los tiempos. Ha habido no sé cuantos fines de semana largos este año y yo me los he perdido todos. Eso al principio era súper frustrante, como el tema de la familia, que no podía acompañarlos en ninguna; lo mismo con la pareja.
Si bien me sigue dando lata, ya no es una frustración, lo acepto y tengo otros momentos en los que disfruto heavy.
"Me gusta tanto lo que hago que si, quizás, llegara a tener un horario normal, me secaría como una pasa, porque amo mucho lo que hago ¿cachai?".
-¿Deseos no cumplidos?
"Puede que dirigir sea un deseo no cumplido".
-¿Te encuentras buenmozo?
"¡Tremendamente!" (Se ríe a carcajadas).
-¿Vicio privado?
"Me gusta mucho bañarme en tina".
-¡Qué rico!
"Sí, me gusta mucho. De hecho, el otro día, cuando llovía y estaba pa' la cagá –tengo una tina grande, antigua- y apagué las luces, puse música, abrí las ventanas del baño; el agua hirviendo de la tina y la lluvia helada que entraba, era como estar en unas termas. Me gusta mucho darme baños de tina".