Miramos la agenda y nos damos cuenta que ese matrimonio que se veía distante es la próxima semana y que la dieta que habíamos prometido hacer, para estar ad hoc con la ocasión, se desvaneció entre los helados que nos tomamos el domingo pasado.
Es en momentos como estos en que la dieta disociada se acomoda para nuestras necesidades: promete ayudarnos a perder tres kilos en siete días y lo mejor es que no restringe la cantidad de alimento que podemos comer.
Este régimen consiste en la separación de los alimentos dentro de una misma comida. La idea es no mezclar proteínas y grasas con hidratos de carbono.
No todo es perfecto. Al ser un método de adelgazamiento rápido, no debe mantenerse más allá de una semana, porque puede ser perjudicial para la salud.
A continuación se presentan tres alternativas para ir variando los alimentos, durante la semana que dura este régimen:
Día 1:
Desayuno: un yogur descremado, diez almendras o nueces y un jugo de verduras.
Almuerzo: salmón a la plancha o grillado. Se puede condimentar con ajo, perejil y aceite de oliva extra virgen.
Soufflé de espinaca y zapallo, batido con dos claras de huevo y cocinados al horno.
Hora del té: ensalada de frutas.
Cena: pollo, cocinado a su gusto y condimentado con limón, pimienta, aceite de oliva extra virgen, perejil y si es posible ajo.
Ensalada de verduras a su gusto. Se puede condimentar con aceite de oliva extra virgen, o vinagre y sal.
Día 2:
Desayuno: un yogur descremado, dos tostadas de pan integral con mermelada diet.
Almuerzo: tallarines condimentados con salsa de tomates casera, un diente de ajo, perejil y pimienta.
Zanahorias ralladas, condimentadas a su gusto.
Hora del té: leche de plátano (con leche descremada y sólo dos cucharadas de azúcar).
Cena: carne de vacuno, cocinada a la plancha.
Una ensalada de pimiento rojo, apio y lechuga (condimentar con aceite de oliva extra virgen o vinagre y una pizca de sal).
Día 3:
Desayuno: una taza de té, dos tostadas de pan de integral con mermelada diet.
Almuerzo: ensalada de atún, con espárragos, espinaca cruda, hinojo y pepino.
Soufflé de zapallo, batido con dos claras de huevo cocinado al horno.
Hora del té: un yogur descremado diet.
Cena: pescado al horno, condimentado con limón, perejil, aceite de oliva extra virgen y una pizca de sal.
Champiñones, cocinados con muy poco aceite de oliva, preparados al horno.
