PARÍS.- Las mujeres que trabajan en los países de la OCDE ganan de media un 16 % menos que los hombres y, en el caso de los puestos de nivel superior, las diferencias llegan al 21 %, según un informe presentado.
Las diferencias entre salarios medios de hombres y mujeres llegan a un máximo de cerca del 40 % en Corea del Sur y de casi el 30 % en Japón, al tiempo que superan el 20 % en Alemania e Israel, indicó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) en el estudio que, acompañado de las conclusiones, debe ser aprobado mañana a nivel ministerial.
La menor brecha se da, por este orden, en Hungría, Nueva Zelanda, Noruega, Bélgica, Grecia, Polonia e Irlanda, donde las remuneraciones de los hombres no superan en más del 10 % a las de las mujeres.
Ese listón del 10 % lo superan ligeramente otros países como Italia, España, Dinamarca o Francia, en los que, no obstante, la diferencia está por debajo de la media del conocido como “Club de los países desarrollados.”
El secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, destacó que salvo algunas excepciones todos los países están evolucionando rápido hacia una mayor equidad, pero “tenemos un largo camino para lograr la igualdad entre hombres y mujeres,” como muestran las cifras.
Gurría, en la presentación del informe a la prensa, hizo hincapié en que esa progresión no es sólo un reto de justicia, sino “también económico” porque para mantener los avances en competitividad es necesaria una mayor integración de las mujeres en la actividad económica.
Los autores del estudio constataron que, desde el inicio de la crisis, las pérdidas de empleo han afectado más a los hombres que a las mujeres, con lo que la diferencia de tasa de actividad entre uno y otro colectivo ha disminuido.
Esa reducción, que tiene que ver con el fuerte desempleo en sectores muy masculinos como la construcción, alcanzó el valor máximo en España, con diez puntos de recorte entre el tercer trimestre de 2007 y el tercer trimestre de 2011.
La rebaja de ese diferencial en la tasa de actividad, que en el conjunto de la OCDE durante ese periodo fue de apenas dos puntos, también llegó a ocho puntos en Irlanda y a seis en Turquía.
La directora ejecutiva de ONU-Mujer, Michelle Bachelet, señaló que no sólo “las mujeres siguen cobrando menos que los hombres por el mismo trabajo” en la OCDE, sino que además trabajan de media dos horas más al día y realizan del 60 % al 80 % de las tareas domésticas.
"La agenda por la igualdad es para todo el mundo,” comentó Bachelet, quien repitió la idea de que no sólo “es un derecho humano,” sino también “una cuestión de eficiencia económica.”
"Es importante que sigamos dando a las mujeres el papel que les corresponde,” afirmó la expresidenta chilena, que se mostró a favor de extender la regla de una representación mínima de éstas en las empresas, las cuales, aseguró, son más eficientes cuando la proporción de directivos femeninos es elevada.
Por otro lado, las organizaciones patronales de la OCDE, BIAC, presentaron otro estudio sobre la misma cuestión en cuyas conclusiones se advierte de que, con el ritmo actual de cambio, habría que esperar hasta 2057 para que las mujeres lleguen a representar el 30 % de los miembros de los consejos de las multinacionales.