El gran secreto para que las mujeres asiáticas mantengan un cutis envidiable, además de los hábitos alimenticios y la poca exposición al sol, es limpiarse el rostro con agua de arroz para suavizar y blanquear el rostro.
En Japón, por ejemplo, las mujeres lo utilizan desde que se tiene memoria por un tema cultural, ya que mientras más pálidas estén su caras, más cercanas estarán de los cánones de belleza que rigen en el país.
Al ser un cereal rico en vitaminas, minerales y almidón, el arroz tiene múltiples beneficios cosméticos, como eliminar manchas y líneas de expresión, o actuar como tonificante y antioxidante.
Katherine Barría, dermatóloga de la Clínica Alemana, explica que el arroz forma parte de la familia de la vitamina B, la que ayuda a la calidad de la piel, las uñas y el pelo. El inositol (vitamina B8) forma parte de las membranas celulares, por lo que participa en las funciones de señales, comunicación traspaso de nutrientes y moléculas entre las células.
Asimismo, como tiene un 10% de ácido pítico, es útil para desprender las células muertas y así prevenir que se active la tirosina, enzima formadora de la melanina y causante de la pigmentación de la piel.
Otro de sus beneficios es mejorar la circulación sanguínea, tanto por la oxigenación y la nutrición de la piel.
La especialista destaca que para optimizar los resultados se debería usar arroz integral, ya que en el proceso de refinamiento se pierden muchas fibras y minerales esenciales.
"Si se quiere buscar un efecto 'antiage' derivado, hay fuentes más ricas como lecitina, cereales, avena, germen de trigo, por lo que se recomienda el uso y consumo de éstas, principalmente lecitina", dice.
Sin embargo, hace una apreciación con respecto a la función anti envejecimiento. "Puede ayudar, por la niacina (vitamina B3), a una acción descongestionante y astringente. Yo creo que ésa sería la utilidad del agua de arroz, al usarlo como astringente, pero no le daría una función antiage tan potente", comenta.
¿Cómo se prepara?
Al igual que las bebidas vegetales, el arroz se deja remojar en agua hasta que esté inflado. Luego se muele y se cuela con un cedazo o malla para que la harina y el líquido queden bien separados.
Esta harina puede ser utilizada como exfoliante para cualquier zona del cuerpo y la leche para limpiar el rostro con un algodón al igual que las cremas cosméticas.
Es recomendable usarla día por medio, y aquellas personas de piel sensible y alérgica, deben tener cuidado porque podría irritar, resecar y activar alergias.