Daily Telegraph
Elizabeth Ramey, una ex estudiante de la Universidad de Oxford, demandó a la prestigiosa casa de estudios por considerar que no investigó adecuadamente la denuncia que interpuso en 2011, luego de haber sido violada por otro alumno.
La mujer de 29 años, cuyo caso será visto mañana por la justicia, asegura que la política de Oxford de no indagar las denuncias de violación, excepto en casos extremadamente limitados, es ilegal y discriminatoria.
"La universidad sólo investiga las formas más graves de abuso sexual (…) Eso es descaradamente discriminatorio", señaló Ramey al "Daily Telegraph", y agregó que su intención es que la casa de estudios elimine esa excepción y desarrolle un sistema para investigar internamente los casos de abuso sexual.
En este sentido, afirmó que su objetivo es que víctimas futuras no tengan que pasar por su misma experiencia. "No voy a conseguir justicia a nivel individual, pero si puedo hacérselo más fácil a la siguiente persona, entonces sentiré que algo constructivo salió del dolor y las dificultades y los desafíos de los últimos cuatro años", indicó.
Ramey afirmó que las actuales directrices que tiene la universidad en este tema son "perversas" y que ponen a las estudiantes mujeres en serio riesgo de ser víctimas de una violación.
Por su parte, la universidad se ha defendido asegurando que sus políticas respecto a los abusos sexuales fueron desarrolladas en conjunto con estudiantes y otras partes interesadas, y que están en línea con las implementadas en otras casas de estudios de Gran Bretaña.
Los hechos alegados por Ramey ocurrieron en junio de 2011, cuando la entonces estudiante cursaba un magíster en Estudios Africanos. Al denunciar el abuso a las autoridades universitarias, éstas le informaron que sólo investigarían si el incidente era reportado a la policía, lo cual hizo.
Si bien el autor de la violación fue suspendido por tres meses, la universidad no tomó más cartas en el asunto debido a que consideró que las evidencias eran pocas. Lo único que hizo fue "recomendarle" al acusado que en el futuro fuera más precavido y evitara ponerse en situaciones con estudiante mujeres que pudieran ser malinterpretadas. Luego, el caso fue cerrado.
