SANTIAGO.- Cerca de 700 niñas embarazadas ingresaron en 2014 en programas y centros del Servicio Nacional de Menores (Sename) y un 5,7% de ellas intentó abortar, según cifras entregadas por el organismo, que se encarga de proteger a los menores de edad en situación de vulnerabilidad.
Las cifras se presentaron ante la comisión de Salud de la Cámara de Diputados, que actualmente discute un proyecto de ley para despenalizar la interrupción del embarazo en tres causales, entre ellas cuando la mujer ha sido víctima de una violación.
"Antes de que los parlamentarios tomen una decisión es necesario que cuenten con toda la información, antecedentes y cifras sobre el tema. El Sename conoce de cerca la realidad de las niñas vulneradas, abusadas y víctimas de violación", sostuvo la directora del organismo, Marcela Labraña, en un comunicado.
Durante el año 2014 ingresaron al sistema de protección chileno un total de 111.440 menores, de los cuales se acreditó que 667 eran niñas víctimas de violaciones y que el 7,7 % de ellas estaban embarazadas, según datos del Sename.
Asimismo, el organismo certificó que 40 niñas del total de menores de entre 11 y 17 años que ingresaron a los centros de acogida, habían intentado abortar en algún momento.
"Hoy acreditar el delito de violación es muy complejo, por eso de las más de 600 niñas que ingresaron embarazadas a nuestro programa, sólo en 52 se logró comprobar que aquél embarazo era producto de una violación", señaló Labraña.
Los datos del Sename ponen "rostro y humanidad a una realidad que estamos viviendo a diario (...) muchas niñas de nuestro país han sido violadas y lamentablemente muchas de ellas han quedado embarazadas y actualmente no tienen ninguna alternativa", manifestó esta semana la ministra del de la Mujer, Claudia Pascual.
Un informe difundido recientemente por la Corporación Miles, que lucha por los derechos sexuales y reproductivos de la mujer, estima que en Chile el aborto es la tercera causa de mortalidad materna y señala que el 17% de los fallecimientos maternos se producen por abortos clandestinos.
En este contexto, el informe de Miles reveló que en 2011, 26.996 mujeres de entre 20 y 44 años ingresaron a hospitales chilenos por patologías relacionadas con el aborto, y destacó que 3.387 niñas y jóvenes entre 10 y 19 años fueron ingresadas por el mismo motivo.
Chile es uno de los seis países del mundo donde está penalizado el aborto terapéutico. Los otros son El Salvador, Nicaragua, República Dominicana, Malta y el Vaticano.
En Chile el aborto terapéutico fue legal hasta septiembre de 1989, cuando fue derogado el artículo de la Constitución. Actualmente, el proyecto de ley para despenalizar el aborto, una de las promesas del gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, se tramita en la Cámara de Diputados bajo tres causales: inviabilidad del feto, riesgo para la vida de la madre y violación.