MILÁN.- El diseñador italiano Giorgio Armani cerró este martes la Semana de la Moda de Milán con una colección de prêt-à-porter masculina para el próximo verano que ha destacado por la elegancia de prendas de colores claros y tejidos vaporosos.
Los modelos desfilaron en el Teatro Armani, al son de ritmos caribeños. Vestían prendas de algodón o lino, con pantalones largos y fluidos y camisetas de punto por debajo de las chaquetas.
La temática giró en torno "al cambio, pero sin dejar de ser fiel al ethos" (el carácter, la forma de ser) de Armani, de 81 años, con colores románticos en una gama de grises, beiges, azules o burdeos, en tonalidades claras.
Armani propone un hombre al que le gusta ponerse sombreros. Combina tanto los tonos azules con los grises como arriesga con los contrastes. Y a veces se deja tentar por la fantasía, con chaquetas bomber de cuadros y pantalones estampados.
Esta edición de la semana de la moda milanesa destacó por 11 ausencias notorias, sobre todo las de Roberto Cavalli, Bottega Veneta, Ermenegildo Zegna, Brioni y Antonio Marras.
Armani dio a entender a la prensa que estaba cansado de desfilar el último día, y todavía más al tener que hacerlo solo. "Siempre desfilo el último, no debería de ser siempre yo", comentó.