SANTIAGO.- Es conocido que Donald Trump se preocupa por su apariencia. De hecho, el Presidente de Estados Unidos no oculta que él mismo se arregla el cabello y que durante años lo ha llevado peinado de la misma manera.
Pero no es su rubio cabello el que ha llamado la atención de la prensa estadounidense en los últimos días, sino que su bronceado permanente en momentos en que en su país se registran gélidas temperaturas.
Según publicó The New York Times, la versión oficial de la Casa Blanca para quienes preguntan por qué el Mandatario siempre luce ese "tono fascinante", es simplemente que tiene "buenos genes".
A ese afortunado antecedente se suma el uso de polvos (traslúcidos, no bronceadores) que el Presidente se aplica antes de sus apariciones en la televisión, según reveló un alto funcionario de la administración que pidió mantener su nombre en reserva.
Pero pese a la explicación oficial, aún persiste la duda respecto a si Trump usa un solárium, tal como un maquillador lo planteó en 2016 y luego aseguró Omarosa Manigault Newman, un ex asesor del Mandatario, en un libro donde lo cuenta todo.
Asimismo, los ex compañeros de internado del Jefe de Estado estadounidense lo han descrito como un fanático de los rayos ultravioleta.
Otro que se ha referido al tema es Even James B. Comey, ex director del FBI y declarado enemigo de Trump, en sus memorias. "Su rostro aparece levemente anaranjado, con brillantes medias lunas debajo de sus ojos donde asumo coloca pequeñas gafas de bronceado", escribió.
Sin embargo, los cercanos al Presidente niegan rotundamente la existencia de aparatos de bronceado en la residencia de Trump, en el ala este de la Casa Blanca o a bordo del Air Force One.
The New York Times también consultó sobre el tema con especialistas, quienes plantearon la posibilidad de que el Presidente use cremas o sprays autobronceantes.
"Él se ve más anaranjado que bronceado", sostuvo la dermatóloga Tina Alster, lo que a su juicio es una señal patente de que utiliza ese tipo de productos.
Eso sí, la especialista -quien afirmó que no tiene nada en contra de las cremas o sprays autobronceantes, mientras las personas sean cuidadosas al aplicárselas-, agregó que la piel de Trump tiene claros signos de daño solar.