Desde hace algún tiempo, la
playa Mai Khao ubicada en
Phuket, Tailandia, se ha hecho famosa entre los turistas no solo por los lindos paisajes que ofrece, sino que también porque los
visitantes pueden tomarse selfies casi "tocando" los aviones que llegan y salen desde el
aeropuerto adyacente.
Preocupados por la
seguridad de los vuelos, las autoridades locales decidieron
castigar a quienes se tomen fotografías en el lugar, con sanciones que llegan hasta la pena de muerte. Esto porque el Código Penal del país establece esa condena a quienes distraen a los pilotos de un avión.
Según informó Bangkok Post, también se trabaja en establecer una
nueva zona de seguridad en las cercanías de la pista de despegue y aterrizaje. "Las
personas y turistas no tendrán autorización para ingresar a esa área a tomar fotos", señaló Wichit Kaeothaithiam, jefe adjunto del terminal aéreo.
Asimismo, el funcionario advirtió que
los drones y punteros láser, tampoco pueden utilizarse en un radio de nueve kilómetros del aeropuerto.
"El turismo y la seguridad deben co-existir", sostuvo el funcionario.
Otras sanciones que pueden recibir quienes no respeten las regulaciones son una
multa de hasta 40 mil baht (unos $832 mil) o pena de cárcel de entre cinco y 20 años.