El Kilauea en una imagen de 2018.
Reuters
Trataba de tener una mejor vista del borde del acantilado y para lograrlo pasó sobre una reja metálica, pero perdió el equilibrio y cayó al interior de uno de los volcanes más activos del mundo.
Eso fue lo que le ocurrió a un hombre cuya identidad no ha sido revelada, cuando se encontraba en Hawaii visitando el volcán Kilauea, macizo que el año pasado hizo erupción, pero que ahora se encuentra en calma.
Según informó The New York Times, el hecho ocurrió alrededor de las 18:30 horas del miércoles en uno de los miradores, desde donde el afectado sufrió una caída de 21 metros. Sin embargo, recién cerca de las 21:00 horas, guardaparques y rescatistas pudieron localizarlo en una angosta saliente debajo del borde del acantilado. Increíblemente, el sujeto estaba vivo, aunque con serias heridas.
Con la ayuda de cuerdas y un helicóptero del Departamento de Defensa, el hombre pudo ser retirado del lugar y llevado de urgencia al Hilo Medical Center, detalló el Parque Nacional de los Volcanes de Hawaii en un comunicado.
"Los visitantes nunca deben cruzar las barreras de seguridad, especialmente en las cercanías de los bordes de acantilados peligrosos y desestabilizados", indicó John Broward, jefe de los guardaparques.
De acuerdo a la tradición hawaiiana, el Kilauea es el hogar de la diosa Pele y ha estado en continua "actividad eruptiva" desde enero de 1983. Sin embargo, el episodio de 2018 fue el más destructivo en la memoria reciente, ya que el volcán arrojó una cantidad de lava similar a la de 320 mil piscinas olímpicas. Además gatilló una ola de temblores, incluido uno de magnitud 6,9.