La conocida actriz de la serie y película "Sex and the City",
Kristin Davis (54), fue una de las nuevas invitadas al programa
Red Table Talk, dirigido por Jada Pikett Smith y su madre Adrienne Banfield, donde relató su experiencia como "
madre blanca" de dos hijos afrodescendientes. Davis adoptó por primera vez en 2011 a
Gemma Rose (7), y en 2018 a su segundo pequeño, ambos descendientes afroamericanos. En la entrevista expresó cómo se siente al saber que como "madre blanca" nunca podrá ser capaz de estar en los zapatos de sus hijos y vivir en carne propia la discriminación, por mucho que vaya aprendiendo a lo largo del camino.
"Lo que quiero decir, es que desde una persona blanca adoptando (niños afrodescendientes) no lo entiendo todo, no hay manera que puedas", aseguró la actriz en el programa titulado
"¿Deberían los blancos adoptar niños afrodescendientes?", donde se discutió este tema y cada invitada entregó sus puntos de vista.
"
Una cosa es ver (racismo) hacia los demás y otra cosa es cuando se trata de tus hijos. Y cuando tú no has pasado por eso personalmente, es un gran problema", añadió, asegurando que siempre ha tratado de aprender sobre los antepasados de sus hijos y de integrarlos con ambas comunidades.
Crédito: Kristin Davis / Captura Instagram.Entre lágrimas, Davis
recordó sus primeras experiencias de racismo como madre de una niña afrodescendiente, cuando Gemma era pequeña. Contó que se sintió "horrorizada" después de escuchar varias veces a las personas comentarle que su hija se convertiría en una gran jugadora de básquetbol algún día.
Además, agregó que
dentro del país se vive un racismo "institucionalizado", y que ese no había sido el primer ejemplo de discriminación vivido con Gemma.
En otro momento sintió que su hija estaba siendo excluida, cuando Gemma era la única pequeña afrodescendiente, y notó que una niña "blanca" sostenía el columpio de al lado de ella en el patio del recreo para que su otra amiga "blanca" pudiera jugar con este, a pesar de que su hija esperaba pacientemente hacía varios minutos por este.
Después de este incidente, Davis fue a la oficina de la administración del establecimiento para hablar sobre el tema. Sin embargo,
ninguno tomó en serio su queja y aseguraron que desde la institución, "todos veían por igual a todos y que no distinguían por colores".
"Fue un momento muy duro de intentar comprender.
No sé cómo todas las personas afrodescendientes han pasado por esto, no entiendo cómo pueden aguantar esto día a día", señaló.
"Encendió un fuego dentro de mí donde no podía estar relajada o casual (acerca del racismo). Pero
nunca seré afrodescendiente, no importa cuánto lo intente, esa es la verdad, y tengo que aceptarla. Por eso nunca seré capaz de decirle a Gemma, 'entiendo cómo te sientes porque ya me ha pasado antes'", señaló.
"Esto es lo que es doloroso y duro.
Me hizo tener una nueva misión para buscar un lugar donde ella estuviera expuesta a todo, de ponerla en situaciones donde yo era la única mujer blanca", añadió Davis.
Por otro lado, la actriz también contó que la decisión de a
doptar a su segundo hijo afrodescendiente en 2018 se debió en parte por una solicitud de Gemma, quien comenzó a pedir un hermano pequeño cuando tenía cinco años.
"Ella me dijo: 'mami me encantaría tener un hermano afrodescendiente'. Y yo entendí perfectamente", finalizó.
