SANTIAGO.- Lo sacaron de sus casillas al técnico Pedro García. Desde que el árbitro Horacio Elizondo selló el triunfo uruguayo con el pitazo final, varios profesionales de la prensa intentaron arrancarle una renuncia, por muy velada que fuera.
Pero García reaccionó indignado, por decir lo menos. Increpó a cada uno de los que le preguntaron qué haría tras la derrota "porque ustedes (los periodistas) lo único que hacen es resaltar el lado negativo, lo malo de este encuentro. Sí, se perdió, pero no jugamos mal. El arquero uruguayo fue la figura del encuentro, sacó dos o tres pelotas que podrían haber terminado en gol, pero ellos acertaron en una jugada fortuita y nos quieren liquidar... Si quieren que renuncie, lo hago, pero esa no es la solución. ¿Acaso no van a hacer lo mismo con el técnico que llegue después? Perderá dos partidos y le pedirán la renuncia, así no se puede trabajar y lamentablemente es parte de nuestra idiosincracia".
Ya más tranquilo, aunque de vez en cuando las emprendía de nuevo contra los que querían "liquidarlo", el técnico chileno sostuvo que "Chile hizo un buen encuentro. Llegamos a ras de piso, por arriba, con centros, con jugadas bien hechas, pero no se pudo quebrar la resistencia del portero rival".
Frente a la pregunta de qué se debía hacer ahora, García sostuvo que él era partidario de "tener una competencia atractiva, pero Chile tiene que prepararse de la mejor manera para lo que viene, ya sean otros partidos eliminatorios o la Copa América. Debemos mentalizarnos para ganar todo, independiente de lo que sea porque el público que vino al estadio se lo merece y porque todos debemos trabajar para sacar nuestro fútbol adelante".