QUITO.- Hernán Darío Gómez confirmó desde Medellín su renuncia irrevocable a la selección ecuatoriana de fútbol, que entró en un proceso vertiginoso de desintegración por las inmediatas dimisiones, en solidaridad, de directivos, miembros del cuerpo técnico y jugadores.
"No tengo las garantías necesarias para volver", dijo Gómez, quien el 8 de mayo fue atacado a golpes y balazos por personas vinculadas al ex presidente ecuatoriano Abdalá Bucaram. "He visto a gente con cuarenta guardaespaldas a la que han asesinado. No quiero que eso me pase a mí", agregó.
De inmediato, el coordinador de la selección, Vinicio Luna, todo el cuerpo técnico y al menos cuatro jugadores anunciaron que también se retiran. "Así no se puede", dijo el capitán de la selección, Alex Aguinaga, quien la víspera había llegado de México para empezar hoy las prácticas para el partido que se jugará el sábado 2 de junio en Lima contra Perú.
También el goleador del equipo, Agustín Delgado, el delantero Iván Kaviedes y el defensa Iván Hurtado confirmaron ya sus dimisiones.
La renuncia de Gómez fue precipitada por declaraciones del abogado de Bucaram, Héctor Solórzano, quien el martes aseguró que la bala que hirió a Gómez en el muslo provino de la pistola del preparador físico de la selección, Elkin Sánchez.
"Lo único que falta es que digan que yo quise suicidarme", comentó este jueves Gómez, cuya renuncia y la inmediata desintegración de la selección mantienen hoy a Ecuador en estado de conmoción, al extremo de que un portavoz oficial anunció que el presidente Gustavo Noboa se apresta a enviar un emisario a Medellín para ofrecer al entrenador "todas las garantías necesarias para que siga con su trabajo tan exitoso".
Ecuador está tercero en las eliminatorias sudamericanas, con 22 puntos al cabo de 12 jornadas, y con un calendario pendiente bastante favorable. Si se clasifica al torneo de Corea del Sur y Japón, sería la primera participación ecuatoriana en un campeonato mundial.
Antes del ataque a Gómez, el entrenador de la selección Sub 20, el también colombiano Hugo Gallego, fue agredido por seguidores de Bucaram, en protesta por la exclusión de un hijo del ex presidente, conocido como "Dalo", del equipo juvenil que participará en el torneo Mundial juvenil de Argentina, en junio. Gallego renunció y volvió a Colombia rápidamente.
Según informes de la policía y relatos de testigos, en el atentado contra Gómez intervino el hijo mayor de Bucaram, Jacobo, quien de inmediato huyó de Ecuador y viajó a Panamá, donde su padre vive desde marzo de 1997, prófugo de la justicia ecuatoriana, que le tramita una serie de juicios penales.
Tras confirmarse la renuncia de "Bolillo", el presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, Luis Chiriboga, se negó a hablar de posibles reemplazantes. "Vamos a insistirle al profesor para que no se vaya", dijo, y anticipó que "le vamos a ofrecer las garantías que pida y vamos a esperar su decisión final hasta el sábado", añadió.
